DONOSTIA
Mientras que tanto desde el Ministerio español de Fomento como desde Renfe insisten en que la causa del accidente ferroviario ocurrido el lunes en la localidad palentina de Villada fue el exceso de velocidad, Semaf Sindicato Español de Maquinistas y Ayudantes Ferroviarios consideró ayer imprudente atribuir el fatal siniestro sólo a un error humano, «cuando los accidentes ferroviarios suelen producirse por varios factores concatenados».Según recalcó el sindicato, el conductor es «experto» y conocía bien el vehículo y la línea por la que circulaba. «El transporte ferroviario, aunque ahora mismo es complicado decirlo, es un transporte muy seguro y para que ocurra un accidente la causa no puede ser simplemente un fallo de una persona», aseguró Santiago Pino, secretario de información de Semaf.
Velocidad inadecuada
Según han confirmado fuentes de la investigación, el tren de largo recorrido entró en la estación de Villada a una velocidad superior a la permitida. Concretaron que circulaba a más de cien kilómetros por hora cuando se disponía a cambiar de vía. Explicaron asimismo que la velocidad máxima convencional se sitúa entre los 30 y 80 kilómetros por hora en un cambio de aguja como el que pasó el tren antes de descarrilar. El maquinista, según fuentes de la investigación, ha declarado ante la Policía Judicial que no se le advirtió de que se iba a encontrar con un cambio de vía en la estación y por eso mantuvo una velocidad superior a 100 kilómetros/hora. Las mismas fuentes aseguran que el conductor afirma que maniobró en función de lo que le indicaban las señales.
Dentro de las diligencia abiertas, el juzgado de instrucción número 3 de Palencia ha requerido a Renfe los telefonemas, sistemas de comunicación en los que quedan grabados los avisos de estaciones de tren dados a los maquinistas en situaciones como la de una vía ocupada. Según fuentes jurídicas, este requerimiento judicial podría contribuir a determinar si las causas del accidente correspondieron o no a un posible fallo técnico que el telefonema no llegase o a un error humano.
El sindicato CGT consideró que el accidente «vuelve a volcar la atención sobre el abandono de la red convencional» y revela «una evidente falta de interés hacia todo lo que no sea construir nuevos corredores de alta velocidad». Insistió, asimismo, en la «necesidad de aumentar la inversión en la mo-dernización de las líneas convencionales».
La compañía ferroviaria Renfe, por su parte, se ha personado como posible responsable civil en las diligencias judiciales abiertas a raíz del accidente.
La ministra española de Fomento, Magdalena Alvarez, ha solicitado comparecer en el Congreso para informar sobre el accidente. El ministerio de Fomento recibió ayer el informe elaborado por la Comisión Técnica sobre las causas que motivaron el accidente. Al cierre de esta edición no habían hecho público el contenido del mismo.
Evolución de los heridos
Mientras, la lista de heridos va descendiendo. Ayer doce heridos permanecían hospitalizados y había pacientes pendientes de altas y de traslados a sus lugares de residencia. En lo concerniente a los dos vecinos de Ordizia, la mujer de 70 años se encontraba ya en planta y su evolución era positiva; el hombre sigue estable dentro de la gravedad. Sigue también grave la chica de Iruñea, Noelia Tirapu de 20 años, que sufre numerosas fracturas en la cara.
