BRUSELAS
La Comisión Europea decidió ayer exigir de manera inmediata que las importaciones de arroz a la Unión Europea procedente de Estados Unidos incluyan un certificado que garantice la ausencia de restos genéticamente modificados de la variedad «LL Rice 601». La decisión responde a las medidas anunciadas para que el arroz transgénico hallado en el mercado estadounidense y no autorizado para consumo humano no llegue a los consumidores europeos. El viernes pasado la Comisión fue informada por las autoridades estadounidenses del hallazgo de restos de organismos genéticamente modificados no autorizados en arroz ya incluido en la cadena comercial del país. El organismo europeo demandó más información sobre este hecho a Washington y a representantes de la industria estadounidense. También solicitaron información a Bayer, ya que es la compañía productora del «LL Rice 607».
Aplicación inmediata
Tras investigar sobre los restos hallados, ayer se dieron a conocer las medidas adoptadas. Debido a que todavía no se sabe con precisión el grado de contaminación del arroz existente en el mercado estadounidense, el organismo europeo consideró necesaria la aplicación inmediata de las medidas preventivas.Según han asegurado desde Bruselas, de manera inmediata sólo podrán atravesar las aduanas comuni-tarias las partidas de arroz que hayan sido sometidas a examen por un laboratorio mediante un método válido y que cuenten con un certificado que garantice la ausencia del señalado transgénico. Anunciaron que las medidas estarán en vigor al menos durante seis meses, y al finalizar el plazo previsto, éstas serán revisadas.
La Comisión ha extendido la responsabilidad de controlar los productos que ya están en el mercado a los estados miembros para asegurar que no contienen esta variedad de OGM. También las empresas importadoras tendrán que encargarse de garantizar que esa variedad de arroz no entra en la cadena alimenticia de Europa y que todas las importaciones están libres de ella.
