Para descubrir los secretos del mar, nada como sumergirse en él
Desde el material necesario para la pesca y buceo hasta la posibilidad de bucear bajo el hielo o practicar la apnea, actividad que consiste en la suspensión voluntaria de la respiración. Es lo que ofrece la tienda NervionSub, en el Casco Viejo de Bilbo, una posibilidad de descubrir los secretos del mar, sumergiéndonos en él.
La inexistencia de una tienda especializada en buceo y pesca en Bilbo fue el motivo princi- pal que llevó a crearse NervionSub, allá por el año 1996. Además de abastecerse allí del material necesario para estas prácticas marinas, también se ofrecen otros servicios, tales como cursos, salidas de buceo o alquiler de equipos. El curso de buceo tan sólo cuenta con un requisito: saber nadar. A partir de ahí, todo el mundo tiene acceso a esta actividad, que se lleva a cabo en 20 ó 25 horas.
Curso de submarinismo
A través de las clases, no sólo se busca que los participantes pasen un buen rato, ya que también se persigue un segundo objetivo: dotarles del conocimiento suficiente como para poder bucear en cualquier parte del mundo. Para ello se hace entrega de una titulación que permite sumergirse hasta una profundidad máxima de 25 metros. Esta iniciativa se lleva a cabo en un total de 15 días, de los cuales ocho son destinados a las clases teóricas y cuatro, a las prácticas. En cuanto a la parte teórica se refiere, el objetivo es dotar a los participantes de los conceptos básicos necesarios, tales como montar el equipo, manejarlo, comunicarse bajo el agua o aprender a respetar el fondo marino, entre otras cosas. En palabras de la encargada de la tienda y de los cursos, Mini Escuder, «se trata de enseñar el nivel básico», un proceso de aprendizaje que valora mucho, ya que destaca la importancia de adquirir los conceptos teóricos previos a la sumersión en el agua. Una vez adquiridos éstos, y para ponerlos en práctica, los participantes hacen ejercicios ya en el agua que van desde ponerse y quitarse la máscara, compartir el regulador o quitarse el equipo, todo ello en las salidas que se hacen a Castro Urdiales y Armintza, lugares donde se pone en práctica todo lo anteriormente aprendido. En lo que a la participación se refiere, Mini Escuder asegura que los cursos están dirigidos a todo el mundo, con la única condición de tener cumplidos los doce años. Una vez completado este requisito, asegura que cualquiera puede participar. Sin embargo, y a pesar de que no existan limitaciones de edad a la hora de participar, resalta que sí existen enfermedades que no permiten u obstaculizan dichas actividades. Entre ellas, la claustrofobia, la epilepsia o las enfermedades relacionadas con el corazón. Por ello, y para evitar que algún problema de salud pueda repercutir en la práctica de este deporte, afirma que en NerviónSub cuentan con un médico especialista que se encarga de realizar un reconocimiento médico a las personas que se dispongan a practicar este deporte. Así, una vez hecho el examen y si los resultados no indican enfermedad alguna que lo impida, estarán listas para comenzar la aventura. A pesar de no ser uno de los deportes mas conocidos, Mini Escuder asegura que en Euskal Herria existe mucha afición, tanto a la pesca como al buceo, ya que en las costas vascas «hay mucha riqueza y existen fondos preciosos». El riesgo también es un factor a valorar en la práctica de este deporte. Sin embargo, Escuder asegura que las costas vascas «no son en absoluto peligrosas». Subraya que, si somos conscientes y respetuosos con el entorno, no existen peligros: «siendo disciplinados en cuanto a lo aprendido en el cursillo, no hay ningún peligro». El apnea y el submarinismo tampoco son las únicas actividades que se llevan a cabo en NervionSub, ya que también cuenta con el curso de buceo bajo hielo, una actividad que, como asegura la organizadora, tiene mucho éxito a pesar de ser la más reciente. Para realizarlo, se desplazan hasta Panticosa para, una vez allí, hacer un agujero con una motosierra y limitar la zona para evitar la intrusión de personas ajenas a la actividad. Los submarinistas se atan con un cabo, que es sujetado por los que se quedan arriba. Se trata de una actividad que requiere mayor preparación, por lo que se hace uso de trajes especiales llamados trajes secos, gorros de látex y guantes gruesos para prevenir la pérdida de calor. Igualmente, también se hace uso del material para que todo salga bien, que abarca desde palas para la nieve hasta barras de señalización. Mientras una parte del grupo bucea, la otra se encarga en la superficie de la seguridad. Más tar- de se hará lo mismo de manera inversa, logrando así que todos los cursillistas puedan bucear bajo el hielo. Según Escuder, esta práctica deportiva requiere experiencia y unas cuantas inmersiones anteriores. -
BILBO
La apnea, un deporte independiente
Además del submarinismo y el buceo bajo hielo, las personas que lo deseen podrán practicar la apnea, actividad que consiste en la pesca submarina sin la ayuda de la botella de oxígeno. Un deporte que Mini Escuder clasifica como «independiente», ya que la persona buceadora puede sumergirse sola, con la única ayuda de su fusil, a diferencia del buceo submarino que suele practicarse en grupo. Además, no requiere preparación teórica, ya que, como explica, «cada cual tiene su nivel y su capacidad pulmonar».
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