Annan anuncia que prevé que Israel ponga fin al bloqueo sobre Líbano «en 48 horas»
·cuatro muertos en un atentado en el sur del pais contra el convoy de un destacado coronel libanes
El secretario general de la ONU, Kofi Annan, anunció ayer que prevé que Israel levante el bloqueo aéreo y marítimo que mantiene sobre Líbano «en 48 horas». Lo hizo en una rueda de prensa en la ciudad egipcia de Alejandría, mientras en el sur libanés un atentado contra un destacado coronel recordaba que la agresión israelí no ha hecho olvidar los sangrientos conflictos internos. Samir Chehade salió ileso, pero cuatro personas murieron.
EL CAIRO
Annan se reunió con el presidente egipcio, Hosni Mubarak, en el Palacio Ras al Tin de Alejandría, en una entrevista a la que acudió el ministro de Exteriores egipcio, Ahmed Abul Gheit. El secretario general de la ONU dijo que no quería parecer triunfalista, pero que espera que «en las próximas 48 horas habrá noticias positivas» respecto al ilegal bloqueo israelí de Líbano. No dio más detalles sobre los motivos de su optimismo.
Annan también se reunió en Alejandría con el secretario general de la Liga Arabe, Amro Musa, la última entrevista oficial antes de partir hacia Ankara, la última etapa de su gira por Oriente Medio, iniciada en Beirut el pasado 28 de agosto. Tras entrevistarse con Musa, Annan aseguró que la liberación de los tres soldados israelíes (dos capturados por Hizbula y el otro, antes, por milicianos palestinos) es «uno de los asuntos más importantes» para la región.
En su breve visita a Egipto, el ghanés no se refirió al anuncio que realizó el lunes en Arabia Saudí, donde aseguró que tanto Israel como Hizbula han aceptado la mediación de la ONU para canjear presos. Sin embargo, ese anuncio, al igual que el realizado en Alejandría sobre el fin del bloqueo, no han sido oficialmente confirmados por Israel, que desde el inicio de la tregua asegura que levantará el cerco sobre Líbano cuando las fronteras sean controladas por fuerzas multinacionales.
De hecho, los barcos y aviones que están llegando a Líbano deben por el momento pedir permiso al Gobierno israelí, pero el lunes un avión de Qatar Airways llegó sin este trámite previo a Beirut y el Gobierno libanés animó a todas las aerolíneas a quebrantar el bloqueo.
Israel se limitó a decir que el vuelo de Qatar Airways había sido «coordinado» con Tel Aviv, sin más precisiones.
Un atentado fallido contra Samir Chehade, un coronel libanés que circulaba por una carretera del sur libanés, se saldó ayer con cuatro muertos y otros tantos heridos. Los muertos son cuatro de los guardaespaldas del coronel, aunque el oficial pudo salvarse porque el artefacto no explotó junto a su vehículo. Entre los heridos hay, al menos, un ingeniero civil que trabajaba en la zona.
Chehade se había distinguido últimamente por dos asuntos altamente sensibles: tuvo un importante papel en el reciente despliegue del Ejército en el sur exigido por la resolución 1.701 del Consejo de Seguridad y colaboró con el polémico fiscal alemán Detlev Mehlis en sus investigaciones sobre la muerte del ex primer ministro libanés Rafic Hariri. En concreto, había propiciado la detención de cuatro generales libaneses supuestamente impli- cados en el magnicidio.
Las fuerzas israelíes se han retirado de otras cinco localidades del sur y las tropas de la ONU han establecido puestos de control mientras llegan las tropas libanesas a la zona, según indicaron testigos y la misión de la Fuerza Interina de la ONU en Líbano (FINUL).
El Parlamento turco aprueba enviar tropas
El Parlamento turco aprobó ayer la solicitud del Gobierno de enviar soldados para participar en el refuerzo de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL). Tras el largo debate, 340 diputados votaron a favor, mientras 192 solicitaron que no se envíen soldados turcos a Líbano. La votación se produjo poco antes de la llegada de Annan. -
Historia de prisión y guerra
Karen MARON |
Desde AL KHIAM (LIBANO)
Ruinas, basura y gasolineras incendiadas. Son los restos que han quedado en la villa de Al Khiam. Las palas mecánicas trabajan desde hace dos semanas levantando los bloques de cemento que eran parte de las viviendas. El despliegue del Ejército libanés se reduce a la instalación de puestos de control, en una localidad donde se libraron los más violentos combates entre milicianos chiítas de Hizbula y las fuerzas militares israelíes. A pocos metros, sobre una colina, Ahmed camina despacio pero con paso firme, a pesar de su cojera. Escombros desperdigados y restos de explosivos sin detonar. Es el saldo del ataque aéreo israelí del 21 de julio, que redujo a ruinas la antigua prisión de Al Khiam, reconvertida en el museo de Hizbula tras la salida de las tropas israelíes en el año 2000. El guardia no habla pero lo observa todo y está pendiente del movimiento de los cuatro visitantes. De pronto, extiende una inmensa bandera amarilla y verde símbolo de las milicias chiítas que envolvía su macizo cuerpo y la inserta en un mástil. Pide que le tomen una foto y rompe su silencio: «Yo estuve detenido en esta cárcel dice juntando sus manos con esposas imaginarias. «Fueron cuatro años que nunca olvidaré, pero ahora somos más fuertes; es la hora de nuestra victoria», señala el guía de la antigua prisión asentada en la «franja de seguridad» en el sur del país durante la ocupación israelí. Ubicada a siete kilómetros de la frontera, en esta que fuera la siniestra prisión de Khiam tan parecida a la temible Abu Ghraib en Irak, 3.000 personas fueron torturadas en sus instalaciones durante quince años desde 1985, según el Comité Internacional de la Cruz Roja. El día de su cierre, el 23 de mayo de 2000, eran 145 los presos que permanecían custodiados por las milicias del Ejército del Sur de Líbano ESL, el grupo mayoritariamente cristiano aliado de Israel. Al grito de Alahu Akbar, fueron liberados por los viejos, que hicieron frente a las milicias que custodiaban el penal y rompieron a martillazos los candados. Todos eran prisioneros políticos nunca fueron acusados oficialmente y no tenían amparo judicial, sospechosos de colaborar con Hizbula y Amal. También fueron detenidos partidarios del Partido Comunista Libanés como la autora del libro “Resistance”, Soha Bechara, encarcelada por diez años tras ser enviada por el PCL en 1988 para matar al jefe del ESL que actuaba como representante de Israel. Desde el patio, los carros de combate, jeeps y cañones intentan erigirse entre las ruinas, hierros retorcidos y escombros huella de los bombardeos aéreos. Mientras desde el mirador se ven claramente las alturas del Golán y las chacras de Chebaa, Ahmed invita a un recorrido por los vestigios de los pasillos oscuros y malolientes de lo que fuera un campo de concentración. En minúsculos calabozos de un metro por un metro, los presos castigados podían permanecer años y ser sometidos a terribles torturas. Otros eran encerrados en celdas colectivas o en mazmorras subterráneas construidas por el antiguo mandato francés bajo lo que fuera un viejo establecimiento militar. Al salir, aunque la llegada al país de los soldados de la ONU se ha inflado en los medios, por los caminos del sur su presencia es mínima. Dos carros blancos de transporte militar avanzan por la angosta vía. Soldados paquistaníes con su típico turbante posan para los reporteros. -
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