IRUÑEA
Isabel Cubero voluntaria de Iruñea de Médicos Sin Fronteras (MSF) viajo ayer a Níger para incorporarse al equipo humanitario que trata la desnutrición infantil en al región de Tahoua en Níger. En concreto se hará cargo de la atención en un hospital pediátrico.
El año pasado MSF trató a unos 62.000 niños severamente desnutridos en Níger. En Tahoua la organización humanitaria cuenta con un Centro de Nutrición Terapéutica Intensiva y dos centros de tratamiento ambulatorio.
El número de casos sigue aumentando a pesar de que el periodo de escasez no empieza hasta este mes. La crisis nutricional en este país no es sólo fruto de la fatalidad o de la falta de alimentos en el mercado. El verdadero problema es que la mayor parte de la población no tiene dinero suficiente para comprarlos.