Vivir en un caserío es más sano, según un estudio
·Expertos explican que se sitúan en entornos alejados de influencias nocivas
Un estudio refleja que los caseríos edificados hasta 1930 son viviendas más sanas, debido a que se ubicaron en zonas libres de ondas perjudiciales para la salud. Los geobiólogos que han elaborado el estudio también destacan que su equipamiento también es más saludable.
ZORNOTZA
Un estudio de un equipo de geobiólogos de Euskal Herria revela que cerca del 80% de los caseríos vascos edificados hasta 1930 se sitúan en entornos no alterados por sondas, y cumplen con los requisitos de viviendas sanas y sostenibles por la bioconstrucción y la geología. Javier Petralanda, uno de los miembros del grupo, explicó que dormir de forma habitual sobre fallas, corrientes de agua o campos contaminados por ondas puede producir malestar general, dolor de cabeza o, incluso, enfermedades más graves. Por contra, relató que los caseríos se sitúan en ubicaciones libres de ondas perjudiciales para la salud. Además, los materiales naturales que predominan en la construcción y en el mobiliario son adecuados porque, según apuntó, muchos muebles sintéticos utilizados en la actualidad desprenden micropartículas tóxicas. Añadió que la distribución interna del caserío también es correcta, dado que deja el área central vacía y sitúa los dormitorios en las zonas más calientes del inmueble.
Los cinco elementos
Aseguró que las construcciones tradicionales empleaban los cinco elementos básicos del “feng shui”: «Utilizaban el elemento como tal o su forma, color o composición. Por ejemplo, la forma cuadrada del caserío vasco tiene que ver con la tierra, y el rojo del tejado con el fuego». Explicó que, posiblemente, observaban la propia naturaleza para conocer las distribuciones libres de influencias nocivas.
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