Elan-Euskadi coopera con Cuba desde Hondarribia
La Itsas Etxea de Hondarribia fue el escenario elegido por los organizadores de la ONG Elan-Euskadi para presentar su nacimiento oficial. El acto, que comenzó a las 20.00, buscaba acercarse a la gente de pueblo y estuvo animado por el grupo Son del Río, que entre guajiras y mojitos animó el encuentro con el ritmo de sus sones.
HONDARRIBIA
Elan-Euskadi es una ONG que ya está en marcha en la zona de Zarautz y Getaria. Hace un año un grupo de Hondarribia decidió pedir ayuda al Ayuntamiento para poder enviar un contenedor a Cuba. El Ayuntamiento les concedió cuatro mil euros, que es lo que cuesta enviar un contenedor desde Bilbo hasta Cuba, y en él enviaron todo el material que pudieron recoger, desde libros, hasta ordenadores y bicicletas. Además de Cuba, trabajan con Ecuador y Venezuela, pero de momento el proyecto se centra en la isla.
Hace unos días se celebró una fiesta en Hondarribia para presentar al pueblo de Hondarribia sus proyectos y sus esperanzas para el futuro. La presentación se hizo en el salón de actos de la Itsas Etxea del pueblo, y en los alrededores del lugar el grupo cubano Son del Río ofreció una actuación previa y otra posterior que se animó con el mojito que prepararon para la ocasión.
Uno de los objetivos del encuentro era conseguir que la gente del pueblo se involucrara en la medida de sus posibilidades con este proyecto. A corto plazo, su necesidad más urgente es conseguir un local, ya que se reúnen en una lonja que les han prestado. El problema de este local es que sólo podrán utilizarlo hasta junio, fecha en la que tendrán que mudarse a otro lugar, ya que el Ayuntamiento les ha dicho que no tiene locales para ofrecer. Los diez miembros activos que participan en esta iniciativa se dedican principalmente a la recogida de material, en el que se han involucrado los organismos de la villa y agradecen la ayuda del Ayuntamiento, según señaló Imanol Garmendia, miembro de Elan-Euskadi y organizador del acto.
Otra de las actividades que han propuesto es un intercambio de misivas entre niños y niñas de ikastolas del pueblo y de Cuba, para acercar a la población infantil la realidad de otros niños y niñas que viven en una sociedad diferente. También cuentan con gente que les ayuda desde la isla. Se encargan de comprobar y verificar la llegada del material enviado, para que no haya problemas en las fronteras con la Policía. Saben lo que tiene que llegar y hasta ahora es un sistema que ha funcionado.
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