DONOSTIA

Nacido en Iruñea el 26 de agosto de 1933, Gordejuela fue un jugador defensivo, que actuó en el centro del campo y en la defensa. Empezó a jugar en los Escolapios, de donde pasó al Oberena y a Osasuna, con el que empezó a jugar en la temporada 50-51 a las órdenes de un ex realista, Cuqui Bienzobas. Desde el club rojillo pasó a la Real en la 53-54. Su fichaje estuvo rodeado de una cierta polémica al denunciar públicamente Osasuna que no podía renovarle por la oferta del club blanquiazul.

Se convirtió en un jugador básico en la década de estabilidad en Primera y llegó a ser internacional B con España en una ocasión en la 57-58. Al acabar la 60-61, la Real anunció su renovación, pero el 3 de agosto del 61 pidió la libertad y pasó al Espanyol. Su marcha unida a las de Arakistain, Galardi, Ansola, Paz y Peporro motivaría el último descenso de 1962. Luego volvió a Gipuzkoa y jugó en el Real Unión.

Debutó en Primera con la Real un 25 de octubre de 1953 en campo del Celta (0-1) y en ocho años como blanquiazul jugó 242 partidos oficiales ­212 de Liga, 27 de Copa y tres de promoción­ y metió catorce goles. La Real trasmitió su pésame y condolencia a la familia y los jugadores del primer equipo portarán brazaletes negros en señal de lutoen el partido del domingo en Mallorca.