GASTEIZ

El Numancia necesita ganar para no meterse por segunda vez en la temporada en puestos de descenso, en un partido que enfrenta en Soria a dos equipos de los que se esperaba más en esta liga. La derrota del pasado domingo en Alicante ante el Hércules deja al equipo soriano a un punto de la zona peligrosa, a pesar de que su juego tuvo un nivel más que aceptable y el equipo dirigido por Andoni Goikoetxea no mereció la derrota. Los de Mendizorrotza sólo tienen dos puntos más, por lo que un tropiezo los colocaría en zona caliente.

Incapaz de mantener la continuidad necesaria por las lesiones y la falta de juego, el Alavés volverá a presentar una imagen renovada en el campo castellano. Finalmente, De Lucas no se ha recuperado de las molestias arrastradas entre semana y no fue convocado, por lo que su puesto en banda derecha se lo jugarán, en principio, Jandro y Gabri, con más opciones para el asturiano. Todo el carril derecho puede ser nuevo, ya que los problemillas físicos que arrastra Coromina las últimas semanas pueden hacer que Edu Alonso regrese al once inicial una vez recuperado de la lesión que lo ha mantenido apartado durante más de dos meses. Pablo Casar tampoco está a tope y es muy probable que deje su puesto de titular a Gaspar, en una defensa que volverá a ser de cuatro, tras dos semanas jugando con tres centrales. En punta, Ogebche y Aloisi formarán la pareja de atacantes.

En un Numancia con muchos viejos conocidos para los aficionados vascos, Andoni Goikoetxea tiene la duda de quién acompañará a Jon Pérez, Bolo en la punta de ataque, ya que tanto el japonés Kenji Fukuda como el centrocampista Fran Moreno tienen posibilidades. En caso de que fuera el delantero nipón, el Numancia volvería a jugar en su estadio con dos puntas, mientras que si es el cedido por Osasuna, el sistema de juego sería el habitual, con doble pivote en el centro del campo y sólo Bolo en la delantera.