ELA afirma que la reforma del IRPF sólo beneficia a quienes tienen rentas altas
ELA rechazará en la calle la reforma del IRPF que las haciendas forales de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa y el Gobierno de Lakua han pactado. «Se ha hecho con una opacidad total, lo que demuestra un importante déficit democrático. No es progresiva ni beneficia a las rentas más bajas. Todo lo contrario a lo que nos dijeron», criticó Elorrieta.
BILBO
ELA rechazó ayer las modificaciones introducidas en la reforma del IRPF que han acordado las haciendas forales de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa y el Gobierno de Lakua porque, una vez más, perjudican a las rentas más bajas; elimina la progresividad de ese impuesto y reduce los ingresos públicos por la vía impositiva, lo que significará que se destinará una menor cantidad a hacer frente a los temas de protección social para los más necesitados.
El secretario general de ELA, José Elorrieta, y Mikel Noval, responsable en temas sociales, acusaron a los responsables de las haciendas de «beneficiar sólo a las rentas altas» y afirmaron que «se ha hecho con opacidad total, lo que demuestra un déficit democrático importante». Explicaron que desde la central sindical se ha pedido información sobre la misma, pero «se nos ha negado. Luego nos dirán que no queremos diálogo social. La reforma del IRPFtambién es parte del mismo», precisó el líder sindical.
Ante esta grave situación, ELA movilizará a sus representantes sindicales para protestar por la actuación «regresiva» y «de derechas» de las haciendas forales. ELA lamenta que con las medidas adoptadas para la declaración de la renta de 2008, las arcas públicas dejen de recaudar 236,7 millones, «una cantidad que supera a la presupuestada por el Gobierno de Ibarretxe para la política de vivienda de 177 millones».
Mikel Noval detalló ante esta merma recaudatoria que la presión fiscal de la CAV supone el 31% del PIB, por debajo del 39,6% de la media de la Unión Europea. «Para alcanzar la media europea, la CAV debería de recaudar anualmente 4.586 millones más de los que realmente se obtiene. Esta reforma nos aleja de Europa en vez de avanzar en convergencia» y adelantó que «contribuirá a aumentar el déficit en protección social de la CAV respecto a la UE, que se encuentra en un 19,2% del PIBfrente al 28,3%de la media europea».
A juicio de Elorrieta y Noval, «la reforma no beneficia a todo el mundo, sólo a quienes poseen las rentas más altas». En este caso, recordaron que existen «más de 100.000 trabajadores con salarios bajos, es decir el 11,8% de las personas que declaran rentas de trabajo, que no tienen ingresos suficientes para pagar el IRPF. Por tanto, tienen una cuota de cero euros. Es cierto que no se les baja, pero tendrán menos oportunidades de recibir compensaciones al ser los más necesitados».
De los 236,7 millones que no se recaudan, el 15% de las personas con menos ingresos «tan sólo no pagan tres millones, es decir, el 1,3% del coste de la reforma», pero «el 4,7% de la población con mayores ingresos dejará de pagar 35 millones de euros, es decir el 14,7% del coste», lo cual demuestra el desequilibrio de esta reforma «que sólo beneficia a los poderosos».
Pagan más quienes menos tienen
BILBO ELA confirma con datos concretos que el cambio en la tarifa general del impuesto recorta la progresividad que se supone que tendría el IRPF para ser equitativo y equilibrado. En este caso, Mikel Noval recordó que «se reduce del 48% al 45% el tipo máximo de tributación y aumenta del 15% al 23%, el mínimo». Eso produce un efecto claro en beneficio de quienes más renta tiene, «que en 1998 pagaba al 56%». El estudio de ELA explica que las rentas de hasta 12.000 euros, tendrán un ahorro anual de 138 euros; quienes declaren unos ingresos de 28.000 euros, se beneficiarán de 125 euros menos a pagar al año. Quienes obtienen 62.000 euros pagarán 365 euros menos; los de 100.000 euros, tributarán 1.492 euros menos y de 140.000 euros hacia arriba, 2.693 euros menos. Para ELA, «es sangrante que el tipo efectivo que se establece para las rentas de capital es del 18%, inferior a la tarifa general que se sitúa en el 23%». Noval rechazó el tratamiento «beneficioso en las EPSV y planes de pensiones», porque quienes más aporten, «tendrán más desgravación»
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