MOGADISCIO
Al menos un centenar de civiles han muerto en Somalia a consecuencia de los bombardeos, según denunciaron ayer testigos presenciales. En declaraciones a la agencia AFP, Moalim Adan Osman, portavoz tribal de Dhobley, al sur del país, explicó que enviaron a un equipo para evaluar el número de fallecidos. «Ellos han confirmado la muerte de un centenar de nómadas inocentes entre Dhobley y Afmadow», subrayó. El también portavoz tribal de Afmadow Cheikh Abullahi Ali Molabon corroboró este balance.Ambos destacaron que «algunas de las personas murieron en los pueblos de Tato, Hayi y Quoqani. Todos los que vivían allí eran civiles».
Otro testigo afirmó haber visto 29 cuerpos cerca de Dhobley, un pueblo situado a no mucha distancia de la frontera con Kenia. «Fui con un equipo para enterrar a las víctimas. Conté 29 fallecidos. Lo que vi es terrible», resaltó Absuge Mohamed Weli, vecino de Dhobley.
Amnistía Internacional expresó su preocupación por estas denuncias y, en ese sentido, ha remitido un escrito al titular de Defensa de EEUU, Robert Gates, para pedirle información y explicaciones.
«Nos preocupa que varios civiles puedan haber muerto como resultado de un incumplimiento de la legislación internacional», señaló en un comunicado Claudio Cordone, director del programa de investigación de este organismo.
«Lo que queremos saber del Gobierno es si sus fuerzas tomaron las precauciones necesarias para diferenciar entre combatientes y civiles cuando eligieron los métodos de sus ataques», agregó. AI también ha pedido a las autoridades keniatas que reabran su frontera, cerrada desde el pasado día 2, para permitir la entrada a las decenas de miles de refugiados.
Por su parte, el Comité Internacional de la Cruz Roja alertó de que «en un futuro próximo la situación humanitaria se complicará con una desastrosa penuria de alimentos en un país en que las condiciones de vida ya estaban muy castigadas a causa de las recientes inundaciones». Manifestó sentirse «preocupado por el sufrimiento de la población civil, así como por la suerte de los heridos de guerra y los prisioneros»
Pese a los crudos relatos de los vecinos de los pueblos atacados, el embajador de EEUU en Kenia, Michael Ranneberger, dijo ayer que las incursiones aéreas estadounidenses no han causadovíctimas civiles. «Ha sido perturbador ver todos estos informes sobre bombas y muertes de civiles. Puedo decir categóricamente que ningún civil ha muerto o ha sido herido como resultado de la acción», declaró a la BBC.
Ranneberger desmintió, por otra parte, al Gobierno somalí al negar que el presunto líder de Al Qaeda Fazul Abdullah Mohammed haya fallecido en los bombardeos. «Hasta donde llega nuestra información, no ha muerto ni ha sido capturado», manifestó. Tanto fuentes gubernamentales somalíes como etíopes dijeron el miércoles que Mohammed había muerto.