Acostumbrada como está servidora a que los malos sean siempre los mismos en la película cuyo guión se escribe cada día en la prensa del nacionalismo extremista español, una «perla» como la que encontré ayer en “La razón” tiene su aquél.

Decía Francisco Marhuenda en su artículo titulado «El ‘rey’ Ibarretxe» algo tan sonoro como que «el nacionalismo vasco siempre ha sido un delirio. Una pesadilla contra la razón y el sentido común. Es la historia de una enorme mentira que nos intentan hacer creer que es una verdad. No sólo de mentiras, sino también de traiciones». Ya ven como empieza la melodía. Terminará a trompetazos.

Lamenta Marhuenda que «a pesar de ello, han conseguido que les otorguemos una credibilidad y una legitimidad que es muy cuestionable. Cuando pienso en el nacionalismo vasco siempre recuerdo a su ‘mítico’ presidente Aguirre que decía que el PNV es la nación vasca en marcha». Ahora la ha tomado con los jelkides.

Y reseña, además, que los peneuvistas, además de traidores, son ladinos:«Desde UCD hasta el PSOE, pasando por el PP, todos han caído en el error de confiar en el PNV y creer que podrían incorporarlo a la gobernabilidad. Todos creyeron que las cesiones al autogobierno acabarían con ETA».

Y tras confesar, de forma inopinada que «nunca he sido antinacionalista», asegura el comentarista que «el problema del País Vasco es el PNV porque no acepta las reglas del juego. Es algo que hemos podido comprobar con su reacción contra los jueces». Esto es nuevo, ¿verdad?

Frota la bola de cristal Marhuenda y adelanta que «ETA será derrotada. Es una cuestión de tiempo, porque no es más que una excreción del convulso siglo XIX. El último estertor de una locura» pero extiende ya su manto de desprecio:«Ibarretxe no sería más que el gris directivo de alguna empresa si el aparato del PNV no lo hubiera convertido en lendakari. En ese momento se transformó, con el plural mayestático que utiliza, en un iluminado que se cree que es el jefe del estado del País Vasco». Suena fuerte.

Y así se explica Marhuenda «su pretensión de estar por encima del poder judicial» porque «adopta una actitud arrogante como si estuviera por encima de las leyes. El PNV es tanto la solución como el origen del problema para resolver el conflicto vasco». Mira que le traen veces a ETB y no termina de entender nada. - msoroa@gara.net