Vecinos y colectivos exigen parar las obras del Euskal Jai
A pesar de que aún no hay respuesta a la solicitud de asociaciones y vecinos de Iruñea para que los restos hallados en el solar que antiguamente albergaba el Euskal Jai reciban un tratamiento de interés cultural, el Ayuntamiento ya ha iniciado las obras de construcción de un centro termal. Ante ello, los vecinos han llamado a movilizarse.
IRUÑEA
Pasando por encima de la gran oposición planteada por los vecinos de Alde Zaharra de Iruñea, que contaban con el apoyo de asociaciones, agrupaciones y numerosos vecinos de la capital navarra, el Ayuntamiento, dirigido por Yolanda Barcina, decidió derruir el edificio que hasta entonces acogía el histórico frontón Euskal Jai y el gaztetxe del mismo nombre. Acto seguido, pasando nuevamente por encima de la voluntad de los vecinos y sin realizar un estudio acerca de las importantes necesidades que tiene el barrio, el Consistorio aprobó construir un centro termal en dicho solar. Ahora, dando un nuevo paso en esa andadura que le ha caracterizado en este tema, el Ayuntamiento iruindarra ha iniciado las obras de dicho centro a pesar de la existencia de una solicitud por parte de numerosos vecinos y asociaciones del barrio para que el lugar sea declarado Bien de Interés Cultural (BIC) ateniéndose a los hallazgos arquitectónicos realiza- dos en el lugar. Una instancia avalada por cerca de 200 firmas de vecinos y colectivos de Alde Zaharra advierte de que «todavía no tenemos noticias sobre la resolución de dicha solicitud», por lo que exige que se paralicen las obras hasta que se sepa si se aprueba o no a trámite su petición presentada el pasado 20 de noviembre en el Departamento de Cultura y Turismo del Gobierno de Nafarroa para que el solar sea declarado BIC. «Sin conocer dicho resultado, el inicio de estas obras hará devenir en inútil dicha protección», apuntan.
«Destrozo irremediable»
El documento presentado esta misma semana señala que las obras, calificadas como «agresión injustificada, irreversible e ilegal», pueden «dar al traste con el espacio arqueológico objeto de posible protección especial», ya que, aseguran, «de continuar al ritmo actual, destrozarán irremediablemente el yacimiento». Además, recuerdan que teniendo el derecho a recurrir una posible resolución contraria a la solicitud de calificación como BIC del lugar, «esta sucesión de hechos consumados supone una clara indefensión legal frente a la actuación admi- nistrativa que menoscaba nuestro derecho a recurrir de modo efectivo las actuaciones administrativas y a colaborar en la defensa de nuestro patrimonio histórico», advierten.
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