Este biopic responde a una iniciativa personal de la actriz Renée Zellweger, vivamente interesada en la figura de Beatrix Potter, pionera de la causa feminista a principios del siglo pasado en todo lo concerniente al reconocimiento de la profesionalidad artística de las mujeres de la época.

La actriz es la culpable positiva de la vuelta al cine del australiano Chris Noonan, retirado desde su éxito con «Babe, el cerdito valiente». Su conocimiento de la combinación de imagen real y animada le convirtieron en el director ideal para dirigir «Miss Potter».

En la película se insertan escenas en las que los personajes creados por la escritora e ilustradora inglesa cobran vida, como es el caso del mundialmente conocido conejo Peter.

Bióloga frustrada por ser mujer

Antes de poder llegar a editar sus primeros cuentos y relatos infantiles, Beatrix Potter fue bióloga, pero la Sociedad Científica de su época nunca le permitió dar a conocer sus investigaciones sobre la relación entre el liquen y las algas, por el mero hecho de ser una mujer. Tampoco lo tuvo demasiado fácil en el mundo literario, pero, en cuanto pudo publicar alguna de sus obras, consiguió abrir una nueva puerta a la extensión de la literatura para niños a otros mercados complementarios. De ahí que sus dibujos se aplicaran a la decoración, a la ropa o al material escolar.

Potter pagó un alto precio sentimental, y que fue víctima de la sexista división de clases victoriana. Por ese motivo prefirió terminar sus días refugiada en la campiña y entregada a una labor conservacionista del medio ambiente.

La actriz Renée Zellweger ha querido personificar todos esos valores aportando su imagen candorosa y entrañable, acompañada de su amigo escocés Ewan McGregor en el papel del fiel colaborador y amante, de cuya pérdida nunca logró recuperarse la protagonista.