Aritz Aduriz fue uno de los grandes artífices de que el Athletic logrará mantener la categoría la temporada pasada. Su fichaje sirvió para aportar al equipo un mayor potencial en la delantera y en media campaña se convirtió en el máximo goleador con seis tantos.

En su segunda temporada, en cambio, no ha tenido tanto protagonismo y con Mané, incluso, llegó a perder el puesto en el once durante varias jornadas. «Todos atravesamos mejores y peores etapas y yo poco a poco estoy intentando pasar ese pequeño bache. Está claro que no estoy en mi mejor momento y lo que hago es intentar entrenar lo mejor posible para pasar ese pequeño bache y coger ese impulso que necesitas para ir aportando más cosas y estando un poco mejor», valoró.

Su expulsión en el Bernabéu en el estreno del de Balmaseda en el banquillo catapultó a Urzaiz a la titularidad y el navarro no ha desaprovechado su oportunidad. En su primer partido anotó dos goles que sirvieron para conseguir la única victoria de la temporada en San Mamés ante el Recreativo y su buen estado de forma han hecho el resto para que pasara a ser prácticamente indiscutible.

La experiencia, el remate y el poderío físico que atesora para luchar por los balones en alto han facilitado al Athletic encontrarse con una forma de juego que le ha dado resultados. Contar con Urzaiz en la delantera, obliga a los defensas rivales ha esforzarse el doble para pararle y, además, ayuda al equipo a dar salida al balón cuando carece de ideas en la medular. Sin olvidar que es imprescindible tanto para atacar como para defender en las jugadas de estrategia.

Aduriz, mientras tanto, ha tenido que esperar hasta que las numerosas lesiones que afectan al equipo le hayan devuelto al once en las últimas tres jornadas. Sin embargo, el donostiarra no ha conseguido aportar todo lo que desea y se le ve demasiado acelerado. Aunque no le salen las cosas como antes y le está costando acertar ante la portería contraria, continúa trabajando como el que más.

Sustituido ante el Betis

Es cierto que ante el Betis no completó un buen partido, pero algunas de las críticas que ha recibido por parte de los medios de comunicación son exageradas porque no se escondió en ningún momento y lo intentó durante todo el tiempo que estuvo en el campo. Esa es una de sus principales cualidades, que siempre lo da todo. Lo que le falta es un poco de tranquilidad para volver a coger confianza ya que los goles vendrán cuando menos se lo espere.

Mané podría ayudarle en este sentido, si se confirma el domingo el equipo con el que probó ayer en Lezama. El técnico rojiblanco parece que tiene en mente apostar por un equipo para el contragolpe en el Calderón. Urzaiz perdería su plaza en ataque y esperaría en el banquillo una oportunidad en caso de que los planes no salieran según lo previsto y si hace falta marcar algún gol.

Aduriz sería el jugador más adelantado y las otras novedades serían la entrada de Gabilondo en la banda izquierda y que Yeste pasaría a la media punta. Luis Prieto, por su parte, cubriría la baja de Amorebieta en el centro de la defensa.

El once con el que trabajó Mané durante el partidillo que organizó y que apunta a titular sería el siguiente: Aranzubia; Expósito,Sarriegi, Luis Prieto, Casas; Iraola, Murillo; Javi Martínez, Yeste, Gabilondo; y Aduriz. Enfrente estuvieron Alba; Zubiaurre, Bergara, Amorebieta, Javi González; Susaeta, Gurpegi, Iturriaga, Dañobeitia; Llorente y Urzaiz. En la segunda parte, Bergara ocupó el lugar de Prieto y en su lugar se colocó Arbilla.

El partido terminó con el resultado de 3-2 a favor del bloque titular. Abrió el marcador en la primera parte Llorente, remontaron ya en el segundo tiempo Iraola y Javi Martínez, Amorebieta restableció la igualada e Iraola decidió con su segundo tanto. También marcó un bonito gol Aduriz, el que hubiese supuesto el 3-2, aunque lo hizo en fuera de juego.

Por otro lado, el jugador del Bilbao Athletic Alex García sufrió ayer un accidente de coche, pero no tiene nada grave.