El Senado bloquea el debate sobre la guerra y Rice va por sorpresa a Irak
El Senado estadounidense bloqueó ayer una moción no vinculante de condena a la nueva estrategia para Irak de George W. Bush. La mayoría demócrata se quedó a cuatro votos de los 60 que hubiera necesitado para sacar adelante el debate. Mientras la Cámara Alta frenaba una declaración contra los planes del presidente, Condoleezza Rice viajó por sorpresa a Bagdad para respaldar el «plan de seguridad" iraquí aunque también lanzó algunas críticas a Al Maliki.
GARA |
Después de que el viernes la Cámara de Representantes estadounidense aprobara una resolución no vinculante en la que expresó su «desaprobación» con el plan de George W. Bush de enviar a Irak a más de 21.000 soldados, ayer el Senado bloqueó una resolución de condena contra esta política. La mayoría demócrata se quedó a tan sólo cuatro votos de los 60 que hubiera necesitado para dar luz verde a este debate.
Se trata de la segunda ocasión en quince días en que el Senado rechaza debatir y votar la moción que censura el aumento de tropas en Irak. Según las normas de la Cámara Alta, los legisladores debían decidir primero si autorizaban el debate, para lo que eran necesarios, al menos, 60 votos a favor. Al no lograrse esos 60 respaldos, la moción no se sometió a debate y, por tanto, no llegó a votarse. No obstante, en esta ocasión, siete senadores republicanos se alinearon con la mayoría demócrata.
Mientras el Senado bloqueaba el debate y aumentan las críticas a la Administración Bush, la secretaria estadounidense, Condoleezza Rice, viajó a Bagdad por sorpresa. Antes de entrevistarse con el primer ministro, sostuvo que la nueva ofensiva contra los grupos armados en la capital funcionará como un incentivo para reforzar el Gobierno de Nuri Al Maliki y que traerá «una nueva esperanza y optimismo».
Pese a estos elogios, Rice dijo que el «plan de seguridad» en Bagdad está siendo «demasiado sectario». En este sentido, subrayó que «necesita elevarse por encima del sectarismo» y abogó por entrar en Ciudad Sadr, barrio chií que cuenta con dos millones de habitantes y es el principal bastión del Ejército chií del Madhi en la capital.
Mensaje a los congresistas
No obstante, no acusó directamente a los iraquíes de parcialidad en la operación y dijo que, por los demás, «las redadas se desarrollaban con normalidad». Precisamente, el avión en el que viajaba sobrevoló el aeropuerto de la ciudad durante media hora antes de aterrizar debido a que se estaba desarrollando una operación militar en Bagdad.
En la comparecencia ante los medios, Rice también se refirió a la negativa del Congreso a apoyar la nueva estrategia de Bush. «Creo que el debate en Washington es una indicación de las preocupaciones que tiene el pueblo americano sobre el éxito que podríamos tener (en Irak) si el Gobierno iraquí no hace lo que ha dicho que hará», manifestó.
Por su parte, la Casa Blanca difundió un comunicado en el que resalta que los congresistas «deberán demostrar» si realmente apoyan a las tropas dando el visto bueno a los fondos adicionales que ha pedido Bush.
«El presidente cree que el Congreso debe proporcionar toda financiación y flexibilidad que necesiten nuestras Fuerzas Armadas para tener éxito en su misión de proteger a nuestro país», subrayó el portavoz presidencial Tony Snow.