El Parlamento navarro rechazó ayer con los votos de UPN, PSN y CDN una moción de EA en la que se instaba tanto al Ejecutivo de Miguel Sanz como al resto de instituciones del herrialde a que «coadyuven a la consecución de las expectativas de paz de la ciudadanía navarra». La propuesta fue formulada antes del atentado de Barajas, si bien ha llegado ahora a pleno, lo que hizo que formaciones como el PSN la tildaran de «extemporánea».

Fernando Puras, portavoz de este partido y cabeza de lista en las próximas elecciones, planteó que «parece que se les hubiera parado el reloj a finales de diciembre» y consideró que «el final de la violencia terrorista ha de corresponder a una decisión unilateral, irreversible e incondicional de ETA».

«Si hay que instar a algo a las instituciones será a la defensa de los principios, del sistema democrático y del Estado de Derecho», afirmó Puras en referencia a la petición de EA.

El proponente, Maiorga Ramírez, consideró que, aunque la iniciativa se formuló antes de Barajas, en la ciudadanía navarra «las expectativas de paz están presentes también después, y ése debe ser el motor fundamental que nos lleve al encuentro. Todos tenemos claro que queremos la paz», argumentó.

Sólo dos formaciones apoyaron su tesis. Para Félix Taberna, de IUN, «las expectativas de paz se rompieron tras el atentado de la T-4», pero «puede haber otra expectativa de paz, otro proceso, que va a ser incluso más pronto de lo que nos podemos imaginar».

Por parte de Aralar, Patxi Zabaleta consideró que «la preocupación social mayoritaria sigue siendo precisamente la paz» y que, en consecuencia, «el mandato político principal que tenemos todos los que estamos aquí es contribuir a ello».

«Día penoso» por De Juana

Tanto UPN como CDN rechazaron la moción en un debate en el que introdujeron numerosas alusiones a la decisión del Gobierno español sobre Iñaki de Juana. En concreto, el portavoz de UPN, Carlos García Adanero, lamentó que este tema se abordara «en un día lamentable y penoso» en el que «el Gobierno de España ha hecho el ridículo».

Desde CDN, Carlos Pérez Nievas calificó la moción de «desafortunada» y acusó al ministro de Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba, de «arrogarse funciones que no le son propias y actuar en nombre de Instituciones Penitenciarias y en contra del sentir abrumadoramente mayoritario de la sociedad española». «De Juana ha chantajeado al Estado de Derecho», dijo.