Con este escrito deseo informar a los directivos de Euskaltel de lo que me ha sucedido desde que decidí, en setiembre pasado, contratar con su compañía la telefonía fija e internet. Y lo hago por este medio porque nada he resuelto a través de los canales, siempre lejanos y anó- nimos, que ofrece la propia compañía. La pretensión, repito, no es otra que la de informar para corregir lo hecho hasta ahora si lo consideran oportuno y, en todo caso, subsanar de aquí en adelante ciertas prácticas informativas si les parece pertinente.

Como decía, en setiembre pasado, y tras la oferta que me hicieron, tomé la decisión de firmar un acuerdo con Euskaltel y, a partir de ahí, todo han sido problemas. En primer lugar, nadie me informó de que no daban servicio a ordenadores Macintosh, lo que supuso un gasto adicional importante para adaptar mi ordenador a la tecnología de Euskaltel. Después de realizar ese desembolso, me encontré con que no podía conectarme a internet ni recibir correo. Tras no sé cuántas consultas con los técnicos de su compañía, seguía sin conseguir solucionar el problema. Al cabo de un tiempo, un técnico -electricista- de Euskaltel puso en marcha internet, pero seguía sin poder enviar mensajes. Tras nuevas e infructuosas tentativas para solucionar este problema, aburrido y cansado, les comunico que no me parece correcto que me cobren un servicio que no había utilizado. Tras una larga espera, me responden que no aceptan mi reclamación y que debo pagar todo lo correspondiente a internet.

Desde hace varias semanas, ya ni puedo conectarme a la red. De nuevo, y por enésima vez, llamo a un técnico de Euskaltel que, tras infructuosas tentativas para restablecer la conexión, me dice que tiene que pasar alguien a solucionarme lo que él considera una avería. Fijamos día y hora. Todavía estoy esperando a que alguien llegue o llame y me dé una explicación. Así mismo, y para no aburrir a la audiencia, he de decirles que desde setiembre no he recibido ni una sola factura de su compañía, y eso a pesar de haber hablado con un empleado para comunicarle lo anómalo de la situación y pedirle que la corrigiesen. Pasados varios meses, todo sigue igual. Hace unos días, envié un mensaje con la misma queja. Espero que alguien se ocupe de la misma. Al no obtener respuesta a estas reclamaciones, he decidido no abonar los recibos a la espera de que se subsane esta anomalía. En fin, confío en que alguien tome nota de lo sucedido y haga algo para que situaciones como estas no vuelvan a ocurrir. Así lo deseo. Un saludo.