El Gobierno de Nafarroa, a través de la Agencia Navarra de Emergencias, decidió en la mañana de ayer prorrogar durante 72 horas más la prealerta por riesgo de inundaciones y ampliarla a todo el territorio, ante la previsión meteorológica de fuertes lluvias para todo el fin de semana.

La prealerta se justifica por el riesgo de que estas precipitaciones pudieran afectar a las cabeceras de las cuencas, así como al río Ebro y desembocadura de sus dos principales afluentes, Aragón y Ega, los cauces con mayor avenida en Nafarroa, según una nota hecha pública por el Ejecutivo navarro.

Ayer se cortó al tráfico la carretera N-113 (Iruñea-Madrid), a la altura del kilómetro 75, en el término municipal de Castejón, inundada por el desbordamiento del Ebro desde el miércoles por la noche, cuando el río llegó a alcanzar un caudal de 2.188 metros cúbicos por segundo y una altura superior a los 6,7 metros. Como desvíos alternativos, el Departamento de Obras Públicas recomendó circular por las carreteras NA-134 (eje del Ebro), la Autopista AP-15 o la carretera NA-115 (Tafalla-Azkoien-Rincón). Además, en otros puntos de la red viaria se recomendaba precaución al tráfico por la presencia de balsas de agua.

Problemas en la Ribera

Aunque en la jornada de ayer éstas fueron las incidencias más reseñables, la Agencia Navarra de Emergencias temía que la acumulación de agua por la lluvia reprodujera los problemas del jueves.

Ese día, los problemas creados por las crecidas afectaron especialmente a la zona de la Ribera, a causa del desbordamiento del Ebro en diferentes puntos. La N-113 permaneció cortada durante toda la jornada (el agua llegaba a una altura de 70 centímetros y afectaba a un tramo de 25o metros de longitud), y, además, la rotura del dique de Cadreita causó daños a más de 80 hectáreas de cultivos de alcachofas, espárragos, frutales, cereal y brócoli, entre otros.

El agua obligó a la Policía Foral a trasladar a un millar de ovejas de un corral, a petición del propietario.

Otra de las poblaciones que resultó especialmente afectada fue la de Cortes, donde el agua también se salió en un tramo afectando a cerca de cincuenta hectáreas de alfalfa, haba y guisantes en el término de la Mora, en el límite con Buñuel. Precisamente en esta localidad, fueron los propios agricultores quienes tuvieron que utilizar los tractores para reforzar el dique con grava, con lo que consiguieron evitar consecuencias mayores.

Instalaciones inundadas

Por otro lado, en Arguedas se trabajó en el mismo sentido para evitar la avenida del río y en Tutera se inundó el paseo del Prado y garajes y zonas bajas de la localidad. El agua llegó a entrar en las instalaciones de la Sociedad Deportiva Recreativa Arenas y en el complejo municipal de Ribotas. No obstante, no tuvieron que lamentarse daños materiales importantes.

Además, la carretera entre Tafalla y Miranga de Arga (NA-6140) también permaneció cortada en el punto kilométrico 13, donde se produjo el desbordamiento del río Arga por el incremento de su caudal.

La playa Uhabia de Bidarte amaneció ayer con el cadáver de una ballena en sus arenas. El mamífero medía 5,86 metros y pesaba alrededor de 900 kilogramos. Se cogieron muestras del cuerpo para hacer una necropsia y tratar de averiguar la razón de la muerte.