El Senado de Bolivia aprueba los 44 contratos firmados con las petroleras
El Senado de Bolivia aprobó ayer los 44 contratos firmados el pasado mes de octubre con doce petroleras, y puso así fin a la crisis desatada por los errores cometidos por el Gobierno que preside Evo Morales en su tramitación parlamentaria inicial.
GARA |
Los senadores de Bolivia aprobaron los 44 contratos de nacionalización firmados por el Gobierno y estudian todavía detalles de tres de los acuerdos de exploración, sobre los que votarán el martes. El Senado ha cerrado así la crisis abierta a raíz de que funcionarios gubernamentales revelaran los errores. El proceso de ratificación deberá pasar de nuevo a la Cámara de Diputados, pero se espera que el nuevo régimen petroleros entre pronto en vigor.
Los 44 acuerdos se aprobaron con igual número de leyes y deberán estar protocolizados después de Semana Santa. La oposición, mayoritaria en el Senado, descartó con esta decisión un proyecto de ley único que presentó el MAS, partido del presidente, Evo Morales, que ya había sido aprobado por la Cámara Baja.
Con esa ley única, el Gobierno pretendía enmendar los errores cometidos en noviembre, cuando los acuerdos fueron enviados por primera vez al Congreso. De haber salido adelante, los acuerdos entrarían en vigor prácticamente de inmediato, pero ahora la Cámara de Diputados tendrá que debatir y ratificar las 41 leyes del Senado.
De los acuerdos aprobados, 37 son de explotación de hidrocarburos y los otros siete restantes, de exploración.
Negociación «irregular»
En noviembre se enviaron al Congreso documentos diferentes a los firmados por empresas como Repsol YPF, Petrobras, TotalFinalElf y una filial de BP.
Al parecer, varios anexos de los contratos, referidos al reparto de ganancias entre Bolivia y las petroleras, fueron negociados de forma irregular después de la fecha límite (28 de octubre) fijada en el decreto de nacionalizaación de los hidrocarburos de mayo de 2006.
La oposición cree que no sólo hubo errores, sino también delitos, pero anunció que no los bloquearía en el Senado, algo que no quería casi nadie en el Senado y menos las petroleras.