En la propuesta que el martes hizo llegar al secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, sobre el futuro del Sahara, Marruecos se reserva la «competencia exclusiva» en materia de soberanía, «especialmente la bandera, el himno nacional y la moneda» y «el régimen de exploración y explotación de los recursos naturales». También deja en manos del Estado las «competencias constitucionales y religiosas del rey, garante de la libertad de culto y de las libertades individuales y colectivas», la seguridad, la defensa exterior, la «integridad territorial» y el orden jurisdiccional. Las únicas competencias que prevé ceder se limitan al ámbito de la administración local, la policía local así como al desarrollo económico, el fomento de las inversiones, comercio, industria, turismo y agricultura.

Según la propuesta, la región «dispondrá de los recursos financieros necesarios para su desarrollo en todos los dominios que procederán de los impuestos, tasas y contribuciones territoriales fijados por los órganos competentes de la región, de la explotación de sus recursos naturales, de la parte de los ingresos de los recursos situados en la región y percibidos por el Estado, y los concedidos en el marco de la solidaridad nacional y los procedentes del patrimonio de la región».

En cuanto al poder ejecutivo, establece que el jefe de Gobierno deberá ser «investido por el rey» y que será el encargado de nombrar a los «administradores necesarios para ejercer los poderes que otorgue el Estatuto de autonomía». Rabat propone crear un Tribunal Regional Superior pero, eso sí, sin perjuicio de las competencias del Tribunal Supremo y del Consejo Constitucional del reino alaui. En este sentido, deja claro que «las leyes, reglamentos y decisiones se deben ajustar al Estatuto de autonomía y a la Constitución».

Propuesta del Frente Polisario

Marruecos ha disfrazado su propuesta de autonomía, rechazada de manera categórica por los saharauis, con un posterior referéndum sobre la misma. Dice que así se respeta «el derecho a la autodeterminación».

En la propuesta que ha presentado a Ban, el Frente Polisario «declara su disposición a negociar directamente con Marruecos, bajo los auspicios de la ONU, las modalidades para celebrar un referéndum auténtico para la autodeterminación».