La Fura afronta como un reto el estreno de «Imperium» en China
El grupo La Fura dels Baus presentó ayer en Pekín su nuevo espectáculo «Imperium", cuyo estreno mundial tendrá lugar el próximo día 1 en esa misma ciudad. La obra tendrá que adaptarse a las exigencias de las autoridades chinas eliminando, por ejemplo, los desnudos.
GARA | PEKÍN
«Esto es casi increíble, es un reto. Estamos muy contentos porque es la primera vez que La Fura actúa en China», manifestó ayer, en una entrevista a Efe, Jürgen Müller, director artístico de La Fura dels Baus y creador de la obra junto con Lluís Fusté.
El grupo catalán presentó ayer en la capital china su nuevo espectáculo «Imperium», cuyo estreno mundial tendrá lugar el próximo día 1 de mayo en esa misma ciudad. Para ello, sin embargo, tendrán que adaptarse a las exigencias de las autoridades chinas eliminando, por ejemplo, los desnudos.
«Vamos a respetar lo que en China no puede ser y después nosotros haremos la representación como la hemos creado para el público occidental», señaló Müller al referirse al estreno europeo (25-27 de mayo en Saint Brieuc, Estado francés) y al del Estado español (2-16 de junio en Soria, León y A Coruña).
A principios de mes, el transgresor grupo explicó en Barcelona que no habrá desnudos ni violencia gratuita en la actuación en China, pero no ahorrarán escenas como una explosión terrorista, un duelo a garrotazos o la masacre final, que prometen ser impactantes.
De hecho, las autoridades chinas aún no han podido ver la obra en vivo, ya que hoy se inicia el montaje y el sábado se celebrará el primer pase, al que se espera que asistan los responsables del festival «Meet in Beijing» («Encuentro en Pekín»), principal evento cultural de la capital china y marco también del estreno.
Para pasar el filtro de la censura, Müller explicó a las autoridades en noviembre pasado que «Imperium» denunciaba precisamente el imperialismo del presidente de EEUU, George W. Bush, lo que al parecer les convenció para estrenarla, aunque en una de las tres salidas masivas vacacionales chinas, cuando la capital se queda casi vacía. «No sé si lo hicieron a propósito o no», opinó ayer Müller.
«Espiral de destrucción»
«Con `Imperium' (`Di Guo' en chino, en alusión al emperador) intentamos tomar consciencia de cómo funciona la espiral de destrucción que se ha apoderado de muchos puntos del planeta, una sensación de agobio crecida a raíz de fenómenos como el terrorismo», apuntó Lluís Fusté en rueda de prensa junto con Müller y las artistas.
Ocho actrices -Valeria Alonso, Florencia Galiñanes, Diana Kerbelis, Lola López Luna, Gádor Martín, Laura Ojer, Marta Roca, Montse Vidal-, vídeos y una pirámide gigante de cinco metros de altura son algunos de los ingredientes de «Imperium», que se estrenará en una colosal factoría del distrito artístico de Dashanzi, epicentro del arte contemporáneo pequinés.
Los 25 actores y profesionales que hacen posible este espectáculo aterrizaron ayer en Pekín y esperan conseguir un aforo de 500 personas diarias en las tres actuaciones programadas del 1 al 3 de mayo.
«Estamos a la expectativa»
La tradicional interactuación transgresora de La Fura con el espacio del público mantiene expectante al grupo: «Es mucho más excitante ver cómo reacciona el público aquí. Tanto actrices como directores estamos a la expectativa». En este sentido, los periodistas chinos se mostraron preocupados por la «agresividad» de los montajes del grupo, por lo que Müller intentó tranquilizarlos recordando sus tradicionales fuegos artificiales y recomendó, en broma, «no llevar abrigos de piel ni tacones».
Junto a la compañía catalana participarán en el festival «Meet in Beijing» el guitarrista Vicente Amigo, el Teatro del Velador (con el espectáculo «La Belle Cuisine»), la compañía Ertza de Asier Zabaleta y el Ballet Nacional de España clausurando el encuentro.
La obra, según la «venden» sus creadores en China, es «una crítica al modo en que se usa la violencia como forma privilegiada para resolver conflictos, al invadir países y engullir culturas». «Un mensaje que -apuntan- los responsables chinos proyectaron inmediatamente hacia Estados Unidos», y aceptaron.