Los 16 magistrados que componen la denominada Sala del 61 del Tribunal Supremo español estuvieron reunidos durante todo el día y hasta muy avanzada la noche para decidir si admitían a trámite las impugnaciones que la Fiscalía y la Abogacía del Estado presentaron el jueves contra 133 candidaturas de ANV.

Como asumió el propio fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, la demanda contra las candidaturas de un partido político legal, como es la histórica formación abertzale, constituye una actuación jurídica «inédita», y en la noche del mismo jueves, los jueces del Alto Tribunal reclamaron a los demandantes que explicaran, antes de las 10.00 de ayer, la «adecuación de la pretensión ejercitada en la demanda» en la Ley de Partidos.

Preguntaban, en definitiva, en qué anclaje legal se basan los representantes de la Fiscalía y de la Abogacía para intentar dejar fuera de la carrera electoral las planchas de un partido, cuando en la Ley de Partidos no se alude a este supuesto en ninguna parte de su articulado. De hecho, en la citada Ley de Partidos sólo se alude a la posibilidad de anular candidaturas de agrupaciones electorales, cuyo carácter legal es diferente al de los partidos.

Frente a esta constatación, la Abogacía del Estado y la Fiscalía presentaron un escrito en el que se dice que «carece de lógica que un proceso con todas las garantías como es el recurso contencioso-electoral -en referencia a las impugnaciones presentadas por ambos estamentos-, que es rigurosamente compatible con los derechos de participación política, sea un cauce procesal limitado a las agrupaciones electorales y no permita cuestionar candidaturas de un partido político legal, cuando han sido instrumentalizadas por otro ilegalizado».

Al margen de la «lógica» de los organismos dependientes del Gobierno español, lo cierto es que hasta bien entrada la noche el Tribunal Supremo seguía deliberando sobre la admisión a trámite de la demanda, y no fue hasta pasadas las 23.00 cuando dieron por finalizado este debate, acordando admitir a trámite las impugnaciones.

En el escrito de los demandantes contra ANV, se alega que se «ha optado por el recurso contencioso-electoral por una doble razón: en primer lugar, porque es el cauce apropiado para garantizar los derechos de participación política y el instrumento legal idóneo para combatir el fraude de ley que se producirá si se permite acceder al proceso electoral a candidaturas de un partido legal que son sucesión o continuación de uno ilegalizado».

Ahora, los jueces del Alto Tribunal español tienen hasta la medianoche de hoy para decidir si anulan o no las candidaturas impugnadas. Tanto las de este partido como las otras casi 260 que fueron objeto de demanda, la mayoría de ellas presentadas bajo la denominación de Abertzale Sozialistak.

A este respecto, la representación legal de ANV tuvo que presentar sus alegaciones contra la impugnación de sus listas -el plazo finalizaba a las 20.00- sin conocer siquiera si la demanda iba a ser tomada en consideración. Para los letrados del veterano partido, la actuación abierta en su contra constituye un «fraude de Ley», precisamente, porque la Ley de Partidos no contempla la ilegalización parcial de las listas de una formación.

Pocas horas antes, en nombre de la representación legal de las 251 plataformas abertzales y socialistas impugnadas, Jone Goirizelaia presentó en la misma sede del Tribunal Supremo las respectivas alegaciones.

En declaraciones efectuadas ante los medios reunidos allí, la letrada y candidata abertzale calificó de «antijurídicas y antidemocráticas» las demandas de Fiscalía y Abogacía, y acusó al Gobierno de Rodríguez Zapatero de llevar a cabo una «persecución de personas y de ideas» con la colaboración del PNV.

Horas antes de conocer la decisión del Tribunal Supremo de admitir la tramitación de las impugnaciones, dirigentes y candidatos de ANV hicieron un llamamiento a la sociedad de Euskal Herria a manifestarse el próximo sábado, en una rueda de prensa en la que hicieron una primera valoración de la actuación del Gobierno español.

Manifestación en Bilbo

El secretario general de este partido y cabeza de lista por Gipuzkoa, Antxon Gómez, compareció en Iruñea acompañado por los principales candidatos de la histórica formación abertzale en los cuatro herrialdes y en las capitales de Hego Euskal Herria. «No son días felices para los militantes de ANV ni para todos los demócratas que en Euskal Herria defendemos la libertad de expresión, la libre difusión de ideas y los derechos civiles y políticos» valoró Gómez, antes de añadir que en este país «se han encendido todas las alarmas de la democracia».

Secundado en su intervención por la cabezal de lista en Gasteiz, Ane Agirregomezkorta, el dirigente de ANV denunció en primer lugar la «operación polítio-ideológica, sin precedentes en Europa», que ha supuesto la investigación cursada por las FSE respecto de casi 12.000 ciudadanas y ciudadanos vascos «para analizar su ideología», una actuación que, como indicaron, «nos trae a la memoria el estado totalitario de Orwell y la pesadilla del control ideológico de la gente».

«Desde ANV jamás hubiéramos pensado que el PSOE, que estuvo con nosotros en la guerra contra los fascistas de 1936, en el Gobierno del lehendakari Agirre, en el Gobierno de la República y en el exilio del franquismo, mantuviera hasta este punto las leyes y las actitudes totalitarias implantadas junto a la extrema derecha española», se lamentó.

A renglón seguido, Agirregomezkorta recordó que la Fiscalía y la Abogacía del Estado decidieron impugnar gran parte de las candidaturas de ANV, pero no quiso olvidar que no son éstas, «ni mucho menos», las únicas listas impugnadas, destacando que además de las de este paartido, han sido más de 250 planchas sobre las que el Estado español ha presentado demanda de ilegalización, y que «desde nuestro punto de vista extrictamente democrático tienen todo el derecho también a estar en las elecciones».

«Nos encontramos con un sabotaje masivo al derecho de sufragio universal, al derecho de la libre propagación de las ideas, por el cual miles de abertzales y republicanos dieron su vida luchando contra el franquismo», criticó la candidata abertzale, agregando que «a 35 años de la muerte del dictador, un partido que se reclama de izquierdas» aplica «la misma jurisprudencia totalitaria que Franco».

Una constatación demoledora

Para los representantes de ANV, «es demoledor constatar la victoria del franquismo sociológico en el Estado español» y, a este respecto, consideraron que «un PSOE fagocitado por las ideas más totalitarias y dirigido por Zapatero ha ido cuantitativa y cualitativamente mucho más lejos que el falangista Aznar en la persecución de lo que él considera la disidencia vasca».

Frente a ello, Gómez explicó que la veterana formación insiste en reivindicar «la paz, la democracia y todos los derechos civiles y políticos».

«A pesar de tener que hacer esta reivindicación en condiciones muy duras, siguiendo la línea democrática de quienes crearon nuestro partido, reclamamos el derecho de todas las opciones políticas de estar presentes en estas elecciones; la nuestra, las que no son nuestras y la de nuestros rivales políticos», apuntó.

Y es que, en este sentido, el dirigente de ANV destacó que «eso es la democracia; ésa es la base de las ideas de izquierda y republicanas. Lo demás es totalitarismo y fascismo».

Haciéndose eco de las elucubraciones mediáticas en torno al número de candidaturas que han sido impugnadas y las que no lo han sido, Gómez zanjó diciendo que «la democracia no se mide en porcentajes, la democracia existe o no existe». Por ello, quiso dejar claro que desde su partido harán «todos los esfuerzos» para que «las ideas de izquierdas e independentistas estén en todos los ayuntamientos, en el Parlamento de Nafarroa y en todas las instituciones forales».

«Se lo debemos a nuestro pueblo», agregó el portavoz y candidato de ANV, para dar su palabra de que «los ciudadanos y ciudadanas que defienden una Euskal Herria libre y los valores de la izquierda tendrán oportunidad de hacer oir su voz en las elecciones».

Agirregomezkorta también se refirió a términos utilizados en las últimas semanas, como viene siendo habitual en las citas electorales desde que entró en vigor la Ley de Partidos, desde determinados ámbitos mediáticos y políticos, y declaró que «nos revelamos, como demócratas, contra conceptos como `contaminación' de personas e `infiltración'». «Nos recuerdan demasiado al discurso filofascista del franquismo con sus conspiraciones judeo-masónicas y tramas comunistas y de rojo-separatistas para inflitrarse en la bienpensante sociedad española», explicó.

Al parecer de ANV, «en 35 años hemos vuelto a la cueva del franquismo de la mano del PP y del PSOE, eso sí, con la complicidad del PNV de los señores Imaz y Urkullu, que les han prestado todo su apoyo político, por activa y por pasiva, y por la insidiosa vía de preparar el terreno para acusar a las gentes de izquierdas y abertzales de ser los causantes de las agresiones dirigidas contra ellos».

Llamamiento a la ciudadanía

Ante la gravedad de esos ataques, «ante la ignominia de un PSOE que ha cruzado todas las líneas rojas que defienden un Estado de Derecho y democrático, que defienden la libertad de pensamiento de la ciudadanía, que defienden la libre difusión de ideas, que defienden, en definitiva, que la persona tiene que ser libre de pensar lo que quiera y profesar la ideología que quiera», desde ANV hicieron un llamamiento a la sociedad de Euskal Herria para que participe en la manifestación convocada para el próximo día 12 en Bilbo.

En la rueda de prensa de ayer adelantaron que en las próximas jornadas darán más detalles sobre esta movilización.

Antes de concluir su intervención, los portavoces de la formación abertzale aseguraron que «si con 40 años de franquismo no consiguieron acabar con el independentismo de izquierdas, una nueva caza de brujas, dirigida esta vez por el Santo Oficio del Gobierno del señor Zapatero, no va a conseguir acabar con la ideología de cientos de miles de euskaldunes».

«Por mucho que intenten tapar el sol con una mano, el sol seguirá estando ahí», añadieron.

Reunión Zapatero-Rajoy

Con respecto a la actuación del Gobierno español contra centenares de candidaturas vascas, ayer se conoció que el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, telefoneó el pasado martes, 1 de mayo, al líder del PP, Mariano Rajoy, para informarle de la estrategia que iba a desarrollar su Gabinete. Según informaron varias agencias de noticias, citando fuentes del Ejecutivo español y del PP, Zapatero comunicó a Rajoy que se iban a impugnar ante el Tribunal Supremo todas las candidaturas con la denominación de Abertzale Sozialistak y gran parte de las de ANV.

Rajoy, por su parte, habría trasladado al mandatario español el criterio de que había que impugnar todas las candidaturas de esta última formación y solicitar al tribunal la suspensión de sus actividades.

El pasado jueves, el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido agradeció al PP su «ayuda» al remitirle documentación sobre ANV.

Por otra parte, ayer unas 300 personas se manifestaron en Lekeitio para exigir unas elecciones democráticas.

En Soraluze, la Ertzaintza identificó a varias personas que participaban en una concentración frente a la sede del PSE, en la que se encontraba el secretario general de este partido, Patxi López, que había acudido a inaugurarla.