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El PSOE saluda y el PP evita criticar el «hay que intentarlo» del Rey español

La práctica totalidad de los partidos saludó e incluso agradeció ayer la declaración fuera de micrófono del Rey español en apoyo al proceso irlandés y dejando caer el mensaje global de que «hay que intentarlo". El PSOE afirmó que recoge la demanda de paz de la mayoría de la ciudadanía. Por contra, portavoces de AVT o Foro Ermua lo criticaron abiertamente. El PP se contuvo, pero uno de sus portavoces reprochó al Rey que «no hablara de De Juana o de las listas".

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La afirmación de «hay que intentarlo» hecha por el Rey español en un corrillo con periodistas anteayer, referida al acuerdo del norte de Irlanda pero con una formulación de carácter general, ha sido interpretada por la mayor parte de los partidos políticos y los analistas como un mensaje de apoyo a la opción de avanzar hacia una solución también en Euskal Herria. Lógicamente, el PP no recibió con agrado el mensaje, aunque evitó criticar a la figura real.

Mientras dirigentes de alto rango como Angel Acebes, Pío García Escudero o Vicente Martínez Pujalte declinaban comentar el mensaje, otros como el diputado del PP Alejandro Balles- tero no pudieron ocultar su contrariedad: «Podía haber hablado de la situación de De Juana o de la presencia de ETA en los ayuntamientos», censuró antes de matizar que su opinión «es absolutamente personal».

Más claros todavía fueron los portavoces de AVT y Foro de Ermua. Desde la primera asociación, su máximo dirigente, Francisco José Alcaraz, aseguró que la figura del monarca «ha sido utilizada» y lo consideró «indignante». «Hay una voluntad de legitimar un proceso de rendición, y hasta se llega a utilizar la figura del monarca para ello», afirmó Alcaraz.

En la misma línea, el presidente del Foro de Ermua, Mikel Buesa, interpretó que hubo una «manipulación», pero añadió que «esto no quita para que el Rey haya dado pie. No ha actuado con la prudencia debida y sus declaraciones no han sido nada afortunadas».

Elogios a Blair

Las palabras del Rey español no pueden situarse como una «imprudencia», ya que según remarcaron los periodistas presentes, fue él quien provocó el encuentro off the record y dio pie a hablar del acto del martes en Stormont. El escenario tampoco parece casual: Juan Carlos I habló en un encuentro con la Guardia Civil al que acudió toda la plana mayor del Ministerio del Interior, con su titular, Alfredo Pérez Rubalcaba, a la cabeza. Si bien algunos medios han destacado que el Rey español dijo también que no había paralelismos entre la situación en Irlanda y la de Euskal Herria, Juan Carlos de Borbón dio esta respuesta cuando le preguntaron por si existían similitudes.

En este breve encuentro, el Rey español elogió la fotografía del acuerdo cerrado en Stormont y el papel del primer ministro británico, Tony Blair. Indicó además que este tipo de procesos son largos y que pueden salir bien o mal, para concluir de todo ello que «hay que intentarlo».

Este mensaje ha sido interpretado unánimemente como un intento de aliviar al Gobierno del PSOE frente a la ofensiva del PP. En cualquier caso, el partido de Rodríguez Zapatero optó por no utilizarlo en este sentido. Diego López Garrido, su portavoz parlamentario, se limitó a indicar que «el Jefe del Estado es una institución que está por encima de los avatares políticos partidarios. Nunca deben ser usadas sus palabras en beneficio de un partido o en contra de otro. Me gustaría que todas las fuerzas políticas hicieran lo mismo y no cayeran en esa tentación», añadió. En cualquier caso, López Garrido sí resaltó que las palabras del Rey «coinciden con los sentimientos del pueblo español», y recordó que van «en la misma dirección» que el discurso de Blair en Stormont, donde situó el proceso de resolución en Irlanda como un ejem- plo válido para otros países.

Aplauso del resto

Juan José Ibarretxe no habló de las palabras del Rey, pero sí de las muestras de preocupación que han despertado en la derecha española. El lehendakari dijo que «a nadie le debería preocupar que ningún cargo público en la sociedad europea diga que hay que intentarlo». Y recordó que el de Euskal Herria «es el último conflicto de naturaleza política que queda sin resolver en Europa». Ibarretxe hizo estas declaraciones precisamente en el marco de una reunión del Comité de Regiones de Europa.

El resto también saludó la declaración. Gaspar Llamazares, de IU, vio en ella «sentido común y de Estado», además de una crítica al PP. Desde CiU se aseguró que «el Rey tiene el derecho y el deber de valorar positivamente lo que ha ocurrido en Irlanda y mostrar su anhelo de que algún día podamos acabar aquí con el terrorismo de ETA», en palabras de Josep Antoni Durán i Lleida. Y por parte de BNG, Francisco Rodríguez llegó a definir como «bárbaras», en sentido positivo, las palabras de Juan Carlos de Borbón: «Son de agradecer y ponen sentido común y racionalidad a este debate».

Ibarretxe

El lehendakari recordó en una reunión con representantes del Comité de Regiones de Europa que el vasco «es el único conflicto político que queda por resolver en Europa. Hay que intentarlo, arriesgar, caminar...»

OTEGI

El portavoz de la izquierda abertzale concedió realce a las palabras del monarca español y situó el acto de Stormont como un ejemplo de que mediante la negociación es posible resolver conflictos políticos.

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