En el Estado francés estudian la ergonomía para combatir las bajas
Los últimos datos sobre el efecto de los trastornos musculoesqueléticos en el estado francés indican que se declaran 31.000 casos al año, lo que supone tres de cada cuatro enfermedades profesionales. El coste de las bajas supone 650 millones de euros, una cantidad importante, por lo que han puesto en marcha una campaña para reducir ese efecto.
Juanjo BASTERRA
Los datos sobre la salud laboral en el Estado francés muestran que las enfermedades profesionales están aumentando, lo que indica de forma clara una pérdida de peso de los sistemas de prevención y que se está dejando la seguridad del trabajador en un segundo plano.
El organismo estatal encargado del seguro de las enfermedades profesionales y otros servicios, similar a la Seguridad Social en el Estado español, muestra una realidad negativa en lo que a la accidentalidad se refiere. Con datos cerrados de 2005, consta que se producen casi 700.000 accidentes de trabajo con baja laboral al año. De ese total, 52.000 accidentados quedan incapacitados de forma permanente para realizar trabajo alguno y en torno a 700 trabajadores fallecen al año.
Los accidentes de trabajo producen 33,2 millones de jornadas de trabajo perdidas.
En 2005, se produjeron unas 50.000 bajas por enfermedad profesional, aunque sólo 41.000 recibieron indemnización económica. Los datos reflejan una tendencia ascendente, lo que indica que los empresarios siguen descuidando la realidad de la prevención de riesgos laborales. Hay que tener en cuenta que las estadísticas oficiales reconocen que un 14,1% de las enfermedades todavía tienen que ver con los efectos cancerígenos del amianto y otro 72,1% con los trastornos musculoesqueléticos, por trabajar en condiciones forzadas, a ritmos repetitivos y en condiciones ergonómicas negativas.
El organismo público que se encarga de las indemnizaciones en casos de accidentes y enfermedades de carácter laboral explica en su último informe que «la prevención de los riesgos osteomusculares es esencial, porque 31.000 enfermedades profesionales declaradas en 2005 tuvieron su origen en alteraciones musculoesqueléticas». En los últimos diez años, el aumento de las enfermedades es constante. Crecieron a un ritmo del 20%. «Los 31.000 casos indemnizados por trastornos musculoesqueléticos en 2005 supusieron una pérdida de 6,5 millones de jornadas de trabajo y un coste de 650 millones de euros en gastos cubiertos por las cotizaciones empresariales», asegura la Seguridad Social francesa.
Esta organización reconoce que se debe profundizar en la prevención de los riesgos que provocan los trastornos musculoesqueléticos. Se unen, precisamente, a la campaña que la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo desarrolla este año.
Entre las actuaciones en materia de prevención a poner en marcha, según ese organismo francés, destaca la organización ergonómica de los puestos de trabajo, de tal forma que lo que prevalezca sea la salud del trabajador en vez de la máquina. Sin embargo, el organismos oficial no hace referencia ni a los ritmos inadecuados ni al trabajo repetitivo que tiene un efecto muy negativo sobre la salud de los trabajadores.
Otro área que pretenden desarrollar en este campo para reducir las enfermedades profesionales tiene que ver con el ámbito de la investigación para «conocer y prevenir los riesgos en las empresas. Para ello se analizará el sistema de trabajo y los factores de riesgo, con el fin de transformar la organización del trabajo», con el objetivo de frenar el incremento de las enfermedades profesionales en el Estado francés.