Mariné Pueyo, Cabeza de lista de ANV al ayuntamiento de Iruñea
"UPN y CDN han metido a Iruñea en un feo túnel, pero vamos a salir"
Iker IRIARTE | IRUÑEA
¿En qué se ha notado la falta de la izquierda abertzale en el Ayuntamiento de Iruñea en los últimos cuatro años?
Se ha notado en muchas cosas, y una de ellas ha sido la participación; nunca han estado las puertas del Ayuntamiento tan cerradas a la participación ciudadana como han estado estos últimos años. Es muy significativo y gráfico que trabajadores del Ayuntamiento hayamos podido constatar cómo se les han puesto ce- rrojos a las puertas interiores del Consistorio. Hace semana y media vimos al PSN llamando a las puertas en el barrio de la Txantrea cuando ha sido el colaborador necesario, cuando no el impulsor, de la falta de participación ciudadana en el Ayuntamiento. Nosotros sí que queremos abrir las puertas de par en par a la ciudadanía. Creemos que la ciudadanía tiene el derecho y el deber de participar en nuestro futuro y en nuestra vida, en la conformación y configuración de qué es lo que queremos en esta ciudad.
Por lo tanto, ¿le parece que han sabido sacar provecho a su ausencia?
Claro, consideramos que los dirigentes del Consistorio se han visto liberados de la política de control cuando no de paralización de muchos proyectos, entre ellos los urbanísticos. Si analizamos un poco la política desde la era Jaime, Barcina ha conseguido llevar adelante todos los proyectos que con Jaime la izquierda abertzale consiguió que se quedasen en los cajones. Barcina ha aprovechado precisamente esa ausencia para, sin un gran coste social y en muchos casos con una fuerte represión sobre la participación vecinal y los movimientos participa- tivos de la sociedad iruindarra, llevar a cabo absolutamente todos los proyectos urbanísticos que muchos consideramos que son nefastos para la ciudad. Y además de ser nefastos y haber conseguido que esta ciudad se convierta en un búnker de cemento gris, consideramos que han condicionado incluso el futuro de generaciones venideras. No han dejado títere con cabeza. Iruñea está consolidada prácticamente al 100%. ¿Qué van a hacer las generaciones futuras? Les hemos condicionado un montón de años de actuaciones, y ninguna organización política tenemos derecho a condicionar a esas generaciones de tal manera. En ese sentido, creo que han podido llevar adelante con toda tranquilidad sus chanchulleos y corruptelas, y son significativas las pala- bras de Yolanda Barcina diciendo que qué bien se vive en el Ayuntamiento sin nosotros. Porque efectivamente, que nosotros estemos ahí supone cuando menos que hagamos saber a la ciudadanía cuáles son los intereses de la gente que les está gobernando. Y eso no les gusta, les molesta y les enfada soberbiamente.
Ustedes proponen un cambio en el Ayuntamiento y en el modelo de ciudad. ¿Por dónde debe comenzar ese cambio? ¿Qué es lo más prioritario?
Uno de los cambios que planteamos como más urgente es la manera de hacer política. Potenciaremos una política centrada en la participación ciudadana, ya que creo que nos estamos convirtiendo en sujetos pasivos. No nos dejan hacer nada, y por lo tanto estamos perdiendo nuestra capaci- dad activa. Creemos que tiene que haber un cambio para que volvamos a ser sujetos activos, pero sabemos que hay que hacer un trabajo importante. En ese sentido, nosotros tenemos una serie de propuestas, no solamente de marco jurídico, que garanticen realmente nuestros derechos de participación, y planteamos también una serie de estructuras que garanticen que ese derecho se va a poder ejercer a través de las juntas de barrio, de las comisiones de ciudad, de los consejos sociales de ciudad, etcétera. Nuestro proyecto supone toda una estructura que evidentemente la pondremos sobre la mesa para que sea consensuada con todos los vecinos, vecinas y grupos políticos.
Por otra parte, queremos cambiar radicalmente de tipo de ciudad, queremos una ciudad más alegre, más sana, más limpia, más sostenible, más rica culturalmente... Queremos que Iruñea sea la capital de la cultura de Euskal Herria, queremos que sea la capital del euskara de Euskal Herria. Da tristeza ver en qué han convertido la cultura de esta ciudad: han machacado toda la cultura de la ciudad, han machacado el euskara. La cultura que nos están vendiendo es una cultura de escaparate; no es participativa y encima, ¿para quién es asequible? Si vamos analizando en todos los aspectos sociales la política de UPN y CDN de estos años veremos cómo lo que están haciendo es precisamente dividir cada vez más la sociedad; es decir, crear dos bloques: los más ricos son cada vez más ricos y los más pobres cada vez más pobres. Pero más pobres en todo: en cultura, en dinero, en calidad de vida, en servicios sociales... Por lo tanto, nosotros creemos que se debe implantar un modelo social cohesionado y que la política lingüística debe cambiar, al igual que el modelo cultural, el modelo ecológico... Queremos una ciudad con muchísimo menos tráfico individual, con un transporte colectivo competitivo, de calidad, económico, con una buena comunicación entre el casco viejo y los barrios, y entre los propios barrios, y en la comarca mediante vías verdes...
Hay que cambiar el modelo de ciudad, y una transformación con cambios radicales y de fondo sólo se puede hacer con la participación de todos y todas, no sólo de los políticos. También impulsaremos consultas sobre temas importantes. La ciudadanía tenemos que decidir, no basta con votar cada cuatro años. Lo que nosotros defendemos no es la democracia delegada, sino la democracia participativa.
¿Qué garantías le supone el PSN para poder conformar un gobierno alternativo?
Creemos que el PSN no es alternativa, eso es imposible. El PSOE tradicionalmente ha tenido voluntad de pacto con UPN, y las decla- raciones que han hecho ahora son bien clarificadoras: en ningún momento dicen que no van a pactar con UPN. Si ya partimos de esa base, difícilmente el PSN puede ser garantía de ningún cambio, porque esas declaraciones denotan el tipo de proyecto político que están defendiendo y denotan que apuestan por la continuidad. En el Parlamento de Nafarroa están defendiendo el estatus actual, apoyados encima por Nafarroa Bai, que dice que mejoraremos un poco pero nos quedaremos como estamos. Eso en ningún caso es garantía de cambio. En estos momentos que consideramos son históricos como no los hemos tenido en los últimos 30 años, que suponen una oportunidad para poder hacer un cambio real, Nafarroa necesita superar el marco de la transición y plantarse en otro escenario político. El PSOE ha renunciado expresamente a hacer ese cambio, y nosotros creemos que somos los únicos que apostamos por el cambio real, que garantizamos que ese proceso vaya a ir para adelante y que pueda ser un cambio radical. Resulta cuando menos llamativo observar el programa de actuación municipal que lleva el PSOE al Ayuntamiento de Iruñea; no supone ningún cambio real respecto al proyecto político que defiende UPN. Además, el PSN ha tenido estos años representación en el Ayuntamiento, por lo que cabría preguntar si alguien sabe algo de lo que ha planteado este partido, porque han renunciado a ser alternativa incluso en la oposición; no han hecho oposición en estos cuatro últimos años. ¿Cómo un partido con una trayectoria como la del PSN puede postularse ahora como garantía de cambio? Creemos que es más de lo mismo: UPN y más UPN, aunque sea con otras siglas.
Los primeros sondeos les conceden al menos entre dos y tres concejales. De ser así, ANV podría ser la clave para formar gobierno. ¿Tendrían algún reparo en posibilitar un futuro alcalde del PSN o NaBai?
Nosotros en principio estamos siempre dispuestos a apoyar todo aquello que suponga una transformación radical de la ciudad. Lo que no vamos a hacer de ninguna forma es posibilitar que alguien acceda a la alcaldía para continuar en esta dinámica, y los que busquen eso nos tendrán siempre en frente. Estaremos con todo aquel que quiera trabajar por una transformación de la ciudad, por una ciudad más ecológica, más social, más justa, más equilibrada, más euskaldun, y no tenemos ningún reparo en apoyar o en pedir que nos apoyen; en configurar unas mayorías que posibiliten ese cambio radical de gobierno.
Por eso aseguramos que vamos a ser garantía de cambio, porque creemos que somos los únicos que de verdad proponemos y propugnamos un cambio radical de esta sociedad. En ese caso, sí que estaríamos dispuestos a trabajar.
La lista de ANV al Consistorio iruindarra está formada por gente nueva, desconocida en la política hasta el momento. ¿Qué destacaría de ella?
No es gente desconocida. Tal vez puedan serlo para los mass media, ya que parece que todo lo que no se ve en esos medios no existe, pero no es así. En la lista estamos dos ex concejales del Ayuntamiento de Iruñea, estamos personas que han trabajado en el movimiento vecinal como Piru Zabalza, estamos gente joven que representa a todos los barrios de Iruñea y que lleva trabajando desde que casi les salieron los dientes en los movimientos vecinales de sus barrios, en los institutos o en sus centros escolares. Es gente que garantiza realmente cuál es nuestro proyecto y qué forma de trabajar tenemos. Es gente comprometida, honrada, y en la que por encima de todo prima su entrega a la defensa del interés general; y no, como en otros, la defensa de sus propios intereses partidistas. En ese sentido creo que es una bonita lista donde se conjuga por una parte la experiencia y por otra la fuerza de la juventud, y creo que desde luego en el Ayuntamiento vamos a hacer un buen trabajo.
¿Cómo ha cambiado el Consistorio iruindarra desde que usted fue concejal?
El cambio ha sido a peor, y creo que la Ley de Murphy se supera a si misma cada día. En aquel tiempo en que Jaime era alcalde, fue una legislatura bastante dura y pensábamos que ya no podía ir a peor, pero con Barcina ha ido a mucho peor. La postura de UPN, con el apoyo y el silencio cómplice del resto de partidos políticos que no han hecho oposición, ha dado lugar a una Iruñea gris y triste. Yo creo que son las palabras que mejor nos definen; incluso son palabras que la ciudadanía utilizamos con mucha naturalidad. Nos han convertido en sujetos pasivos y mucha gente incluso ha perdido la esperanza.
Pero realmente vamos a salir de este pozo. La política de UPN y CDN nos ha metido en un túnel negro, oscuro y feo, pero nosotros creemos que podemos salir y vamos a salir. Y de hecho, la ilusión y la esperanza que están generando estos comicios es un ejemplo de ello. Al final hemos visto que otra Iruñea es posible, que es posible que éstos dejen sus poltronas, y en ese sentido animamos a la ciudadanía a que vote. Nosotros, cuantos más votos obtengamos somos mayor garantía de que ese cambio en la ciudad será más radical y más posible, y que vamos a construir esa Iruñea de colores con la que muchos venimos soñando desde hace demasiado tiempo.
Realmente no sé si el que haya listas ilegalizadas juega en nuestra contra. Lo que sí sabemos es la postura que tradicionalmente los medios de comunicación tienen respecto a la gente que defiende ciertas forma de hacer política, en este caso de izquierdas y abertzale, que tenemos mucha tradición de trabajar en la calle. Lo hemos hecho bien y lo saben. Y cuando hemos trabajado en las instituciones nunca hacemos promesas, sino que nos comprometemos con nuestro trabajo, voluntad y honradez, que está demostrada a lo largo de muchos años. En ese sentido, somos como los encargados permanentes de vigilar qué es lo que hacen y lo que no hacen, y eso no les gusta. Por ello, esos medios de comunicación que están al servicio de los poderes económicos y políticos lo que no quieren es que alguien dé a conocer precisamente todos esos chanchullos que se traen entre manos.
Durante la última semana tanto la opción de Acción Nacionalista Vasca al Ayuntamiento de Iruñea como la propia cabeza de lista de la misma han sido duramente criticadas por parte de la actual alcaldesa de Iruñea, Yolanda Barcina (UPN). Basta citar la carta publicada en “Diario de Navarra” el pasado viernes o su intervención en el acto principal de campaña que realizó el sábado junto al presidente navarro, Miguel Sanz, y al líder del PP, Mariano Rajoy, en Baluarte de Iruñea. En su misiva, Barcina recordaba que Mariné Pueyo ha concurrido «hasta siete veces» en las listas de «Batasuna» –se refiere con ello a candidaturas de la izquierda abertzale como HB, EH y AuB– y acusaba a la izquierda abertzale de «haberse aprovechado de la institución municipal para obtener información y dinero público con los que socavar las libertades y los derechos más fundamentales mediante el crimen y la coacción». La polémica alcaldesa añadía por ejemplo que «estos individuos» –se refiere a los concejales de la izquierda abertzale– lanzaban amenazas «continuamente» a los ediles escoltados, «veladas en el salón de plenos y más directas en los pasillos», concreta. Asegura, asimismo, que anotaban «sus entradas y salidas del Consistorio» y trataban de «extender a toda la ciudad el ambiente irrespirable que provocaban en la Casa Consistorial», para lo que se valían, continúa, «de su siniestro eufemismo de socializar la violencia».
La primer edil censura que la aceptación de la lista al Consistorio iruindarra ha sido la consecuencia de una «lotería» y critica también la decisión tomada al respecto por el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, que no la impugnó.
Ya en su intervención del sábado, Yolanda Barcina afirmó que el objetivo de ANV en Iruñea es «intentar amedrentarnos a los que creemos en la democracia, la paz y la libertad», y explicó que si la candidatura abertzale logra sacar un solo concejal, «obtendrán 50 millones de pesetas en los próximos cuatro años».
En respuesta a eso, Pueyo señaló ayer en un acto en Etxabakoitz que «quienes de verdad entran al Ayuntamiento para financiarse son partidos como UPN, que además de beneficios personales como en el caso de Eguesibar, también buscan beneficiar a las empresas de su entorno», y como prueba de ello aludió a los seis millones de euros «regalados» ahora a FCC, «vinculada al PP», en concepto de lucro cesante por un supuesto defecto en la tramitación del proyecto del parking de la Plaza del Castillo.
Además, la cabeza de lista de ANV apuntó que todas esas críticas y razones que da la actual alcaldesa para descalificar a su formación no son sino «una cortina de humo» para tratar de esconder la verdadera razón de la preocupación y nerviosismo que le azota «que unos buenos resultados de ANV van a dar con sus huesos en la oposición», asegura Pueyo. También le preocupa, añadió, que ANV quiera «cambios profundos y trascendentes para la mayoría social de Iruñea cuanto antes», porque en su opinión, la alcaldesa se ha dado cuenta de que eso «es perfectamente posible y además deseable».