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«Hay que tener una filosofía fija, saber qué queremos y a dónde vamos»

AITOR López Rekarte , capitán de la Real Sociedad

Aitor asume que el del sábado será su último partido como local en Anoeta y desde la libertad que da no ser parte interesada en el futuro y desde su plena madurez y conocimiento de causa lanza unas reflexiones interesantes que adquieren mayor relevancia por su condición de capitán de una plantilla que desea que, pase lo que pase en estas dos semanas, se defina un proyecto claro de futuro que una a todos.

Joseba ITURRIA |

Aitor desea despedirse el sábado de su afición con una victoria que mantenga viva la esperanza de permanencia.

¿Qué sensaciones tiene ante el partido del sábado con el Racing?

Es el partido más importante que podemos encarar y a todos nos gustaría jugarlo. Serán once los que salgan e intentaremos estar a tope para jugar. Probablemente será mi último partido en Anoeta. No lo sé seguro, pero hay bastantes opciones y ojalá lo recuerde como algo especial y sirva para dar un paso para que la Real siga en Primera.

¿En lo colectivo cómo se afronta el encuentro?

Sabemos que está difícil, pero de una semana a otra cambia mucho y pueden darse resultados si ganamos nosotros, porque si no ganamos estamos en Segunda. Debemos hacer lo nuestro. Plantear el partido muy bien, sobre todo mentalmente porque físicamente estamos bien. Lo prioritario es dar la vuelta a la sensación de tenerlo complicado. Hay que salir al campo a disfrutar, aunque en estos momentos sea difícil, y ser efectivos. Lo repito mucho, pero es fundamental en el fútbol.

¿Hay que pensar que si la Real gana los dos partidos se salvará?

Lo fundamental es ganar el primero. El último es una final y especial, en Mestalla muchos de nosotros aún no hemos ganado y sería bonito después de estar todo el año en puestos de descenso, salir en la última jornada. Garitano nos comentaba que en estas situaciones se ha salvado dos veces. Esos detalles te hacen ver la luz. Aunque tengamos experiencia, esta situación es la más límite y, tal como ha ido todo, la satisfacción de salvarnos sería más grande e increíble.

¿Espera que Osasuna juegue contra el Betis como contra la Real?

No pido nada a nadie, cada uno sabe lo que tiene que hacer. Al final hablamos de profesionalidad, de una palabra que sale mucho y sobre todo en las últimas jornadas cuando se habla tanto de primas a terceros... Lo importante en el mundo profesional y en lo personal es tener la conciencia tranquila. No sé con que once jugará, pero quiero que ganen o empaten para mantener opciones si ganamos.

¿Por qué se ha llegado a esta situación tan delicada?

Los resultados son indiscutibles y al final no es circunstancial y tampoco es flor de un día. El equipo lleva años rozando el descenso y al final puede haber una falta de criterio. Siempre he dicho que me gustaría que la mayoría de la gente fuera de la cantera y que se opte por eso, pero en la Liga actual con tanta competitividad es difícil llevarlo a cabo. Equipos que siguen esa dinámica son pacientes y eso aquí se ha perdido. El buscar resultados a corto plazo te hace tomar decisiones que al final no son buenas. Se buscan recursos inmediatos y el proyecto debe ser mucho más a largo plazo.

Luego hay muchos factores. Para mí es fundamental comenzar la Liga bien y encarar las primeras jornadas con buenos resultados. Hay equipos que nos llevan ventaja en eso y cuando estás en puestos de abajo cuesta mucho salir. Se pierde mucha confianza, hay que tomar decisiones difíciles cuando las cosas van tan mal y tampoco hemos tenido suerte con las lesiones. Se unen muchas cosas y lo prioritario son los conceptos. Hay que tener un concepto y una filosofía fija para que nos miremos a la cara y sepamos qué queremos y a dónde vamos.

La llave del éxito no la tengo yo, que opino que la base tiene que ser la cantera, ni el que piense que hay que fichar a gente de todo el mundo, pero hay que optar por una filosofía, que la mayor parte de la gente apoye el proyecto teniendo en cuenta que es a largo plazo. Es complicado mantener una estabilidad con la presión que hay, pero se puede hacer. Hay que atar muy bien todo. Cuidar y mimar mucho a la gente que tienes dentro del equipo, se tiene que sentir querida. Y luego, cuando hay incorporaciones, aquí siempre la acogida ha sido buena, los que han venido se han sentido a gusto y lo han demostrado implicándose con el proyecto. Pero no podemos estar poniendo parches todos los eneros o diciembres. La gente necesita estabilidad, confianza y seguridad, palabras claves en el fútbol.

¿Qué le parece la convocatoria de Junta para el 30 de junio?

El accionista va a decidir que proyecto quiere y lo importante es que haya un proyecto y que la gente se sienta identificada con él. No se puede confiar hoy en un proyecto y dudar mañana. Tanto los accionistas como los abonados tenemos esa responsabilidad y es el momento de apostar. Este año tiene que ser un punto de inflexión, se quede el equipo en Primera o baje. Tiene que haber algo y no sé en qué sentido. Debemos lograr unir todo lo que rodea a la Real. Si hay tanta división es complicado. Las situaciones que se han vivido, más que unir han separado, y eso hay que cortarlo de raíz. Queremos que la Real sea un equipo con una historia, un sentimiento y una filosofía.

Se necesita estabilidad y ahora se quiere hacer una revolución...

Hay que elegir entre una cosa y la otra. Aunque las circunstancias hacen difícil mantener un bloque sólido y dar una confianza, para un profesional sentirse respaldado es fundamental. Muchas veces pedirlo se nos hace difícil porque ante todo queremos demostrar que en las situaciones difíciles responde- mos, pero hay momentos en los que es importante que haya apoyo a un bloque sólido. Si mantenemos aún nuestra esperanza es porque el grupo ha estado fuerte. Muchos equipos habrían tirado la toalla hace tiempo y no porque lo diga yo. Hay gente que ha vivido fuera estas situaciones y ve que el compromiso de esta plantilla es intachable.

Es difícil que haya una estabilidad cuando siempre se pide la marcha de los veteranos. Aranzabal al despedirse se dirigió a usted para decirle que sería el siguiente. ¿Ahora le tocará a otro?

Es algo que pasa de lo anecdótico y que se repite durante años aquí. Los que llevamos más tiempo tenemos más responsabilidad y hay un sector de la gente que tiene no sé si intención de derrocar o que a uno le vayan las cosas mal, pero hay que apechugar con eso y es difícil salir de esa dinámica. Yo llevo un tiempo en el candelero y no me ha ayudado, pero ha habido mucha gente que me ha apoyado y es la que me aporta. Al final mentalmente, esto dificulta estar a lo que tienes que estar, porque es muy difícil mantener una concentración total en un partido, no hay nadie que lo consiga, y me ha tocado convivir con ello. Nos ha tocado a varios pasar por esto, siempre jugadores que llevan tiempo y que han estado en la capitanía y a los que nos ha tocado dar la cara en momentos difíciles y somos los que nos llevamos los palos. Sabía que esto podía pasar, pero alguien debe dar la cara y no me importa darla por el vestuario. Espero que no le toque a otro pasar por esto, pero pensar lo contrario no es fácil porque se repite muchos años.

Espero que el siguiente capitán o capitanes no tengan que sufrir esto. Me parece injusto. Ahora mismo a un valor tan importante como a Xabi Prieto, que le traten de esa forma, no es el camino de buscar una identidad. Con el escaso tiempo que lleva en Primera, tener la responsabilidad de ser capitán y de sentirse importante y le estamos dando más opciones para que se vaya que para que se quede. En este tipo de cosas hay que ser autocríticos, reflexionar y cuidar a la gente de casa. A mí me encantaría que jugara en la Real mi vecino, alguien de mi pueblo o del de al lado, que tenga unas raíces y unos valores que cada vez se ven menos. Cada vez cuesta más sacar a gente de tu cantera y viendo este año lo que ha pasado en Gipuzkoa con nosotros, el Bruesa y el Bidasoa, que en una país tan pequeño como el nuestro tenemos un nivel de competitividad muy grande, mantenerse es complicado. Y si le añades que la gente empiece a tener que emigrar porque no se sienta querido en tu equipo... Esto hay que cuidarlo, es fundamental para la filosofía que debe tener la Real.

¿Es triste que para que cambie ese ambiente haya tenido que renunciar a la opción de seguir?

Es reflejo de cómo es esto. Estoy tranquilo porque he tomado la mejor decisión después de haberlo meditado bastante porque le he dado vueltas a todo. Era mi futuro, tenía dos años más, eran muchas cosas que había implícitas al margen del dinero, que era importante por supuesto. Pero el fútbol está así y al final debes tomar decisiones y estoy contento.

¿Cómo le gustaría que fuera la probable despedida del sábado?

Me gustaría recordar el último partido en Anoeta como algo grande en sentimiento. He intentado dar lo máximo para este equipo como todos los que salimos al campo. Sentimentalmente es lo más importante para alguien que ha jugado en todos los equipos de la Real y eso lo tengo muy dentro. Ahora que tengo que salir y despedirme, no me lo planteo como algo que deba ser de una determinada forma, pero, como a Darko, nos gustaría que sea con una victoria y que con otros resultados sigamos con vida. Y sentir el calor de la gente.

«No tengo ningún problema de jugar en Segunda si me quieren, pero si me quisieran tendría ya alguna oferta»

Aitor cree que tiene un 90% de posibilidades de dejar la Real a pesar de que desearía seguir incluso en caso de bajar a Segunda. Pero siente que el Consejo no quiere que siga.

¿Piensa en su futuro personal?

Es inevitable, me estoy jugando mi vida y la de mi familia. Mi representante lleva estas cosas y yo me mantengo al margen porque lo mejor es estar concentrado en el trabajo con la Real. Se miran cosas y, si no es aquí, espero seguir jugando en otro lado. Hay que mirar todo, pero si hay una oferta de la Real se valorará.

¿Estaría dispuesto a seguir en Segunda?

No tengo ningún problema de jugar en Segunda o Tercera si me siento querido. Pero en la Real se intenta dar un cambio de rumbo y se ve en estas decisiones que no son fáciles de tomar para ellos, pero lo importante es mirarnos a la cara y ser sinceros. Se dicen las cosas y punto. Si me quisieran hubiera tenido alguna oferta. Siempre te queda una esperanza, el ego te dice que después de tantos años mereces que te ofrezcan algo, pero lo importante es que como profesional dé lo máximo hasta que acabe la Liga y, si tengo oferta, bien y, si no, también. En este momento en un 90% me veo fuera porque han tenido el tiempo suficiente para llevar el tema en otro sentido, lo que habría sido más cómodo para todos. Al final nos hemos visto obligados a tomar decisiones para que no haya presión. Si la Real hubiera querido algo conmigo habría tenido una oferta. No cierro las puertas a seguir aquí porque tengo muchas cosas aquí, pero esto no acaba. Es el año en el que mejor estoy física y mentalmente. No puedo aportar mucho últimamente y sí estoy un poco dolido con la situación porque siempre quieres aportar más como todos los que no jugamos, pero no soy nadie para decir que tengo que jugar. Estamos en una situación determinante y el compromiso de todos es estar unidos.

Se le sitúa en el Athletic y en el fútbol inglés, ¿se siente valorado en el mercado?

Es difícil comentar qué supone Aitor en el mercado. Mi valor más fuerte es que he tenido pocas lesiones, casi con todos los entrenadores he jugado y he tenido una regularidad. Llevo muchos partidos y tras diez años en la Real tengo ilusión por seguir jugando. Me siento joven, puedo aportar cosas al fútbol y, sobre todo, a mí mismo. Quiero seguir enriqueciéndome personalmente. Joseba ITURRIA

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