Los superhéroes musulmanes plantan cara a Spiderman
Son noventa y nueve superhéroes y cada uno posee uno de los atributos divinos atribuidos a Alá. El cómic «The 99» pretende transmitir a «todos los niños del mundo los valores morales del Islam», aquellos que los medios de comunicación occidentales no suelen destacar.
Susana SAMHAN | EL CAIRO
A Superman y Spiderman les han salido 99 competidores en el mundo árabe. Son los protagonistas del tebeo del mismo nombre «The 99», «el primer cómic sobre la cultura musulmana», dijo ayer su editor en Egipto, Tarek Housni.
Publicado en árabe y en inglés, y con una periodicidad mensual, pretende transmitir a «todos los niños del mundo, no sólo a los musulmanes, los valores morales del Islam y su cultura», según explicó Housni, director general de Teshkeel en Egipto, compañía editora del tebeo.
Cada superhéroe -generalmente con rasgos físicos árabes: pelo oscuro, ojos negros, piel morena- representa uno de los 99 atributos divinos con los que está adornado Alá. «Por ejemplo, uno de los personajes es Noura, que significa luz, uno de los atributos de Dios», explicó el editor. «Por este motivo, ella alumbra a cada persona para que encuentre su bondad interior».
Aparte de Noura, otros personajes son Moumita, que significa «destructora», y que utiliza su poder para destruir todo lo malo y Jabbar, que es «poderoso», y usa su fuerza para ayudar a los demás, y así sigue la lista hasta llegar a 99.
La trama se remonta al siglo XIII, cuando los mongoles invadieron Bagdad con el objetivo de destruir la civilización árabe y, con ella, toda la sabiduría del califato. Para preservar esos conocimientos, se crearon 99 piedras preciosas que albergaron ese saber y que fueron llevadas al lugar más remoto del imperio árabe: el reino de Granada en Al Andalus. Esa zona del Estado español «es una pieza clave en el cómic porque para nosotros y mucha gente es todavía un sueño: allí hubo una gran civilización donde varias culturas convivieron, y es el lugar donde Oriente y Occidente entran en contacto», comentó el editor.
Más de un superhéroe
Cuando las fuerzas de la Reconquista llegaron a Granada, las piedras se esparcieron por todo el mundo y permanecieron en paradero desconocido hasta el día de hoy. Aquel que se encuentra una gema adquiere superpoderes extraordinarios.
Según Housni, desde un punto de vista musulmán, el poder siempre viene de Alá, así que cuando un personaje se convierte en superhéroe «es porque es un regalo de Dios». Como Alá es el único que puede reunir todas esas cualidades, «no podía existir un único personaje, como en los tebeos de Batman o Superman, por eso creamos 99», explicó el responsable egipcio del cómic. Por este motivo, en cada entrega aparecen tres superhéroes que colaboran para luchar contra las fuerzas del mal.
Gestado en Kuwait y con una tirada de 25.000 ejemplares, la versión en papel de «The 99» se distribuye en doce países árabes desde julio de 2006 y está previsto que llegue próximamente a Gran Bretaña y a Estados Unidos. También cuenta con una versión en internet «www.the99.org» en inglés y en árabe.
Se remonta al siglo XIII, cuando los mongoles invadieron Bagdad con el objetivo de destruir la civilización árabe y, con ella, toda la sabiduría del califato. Para preservar esos conocimientos, se crearon 99 piedras preciosas que albergaron ese saber.
Los creadores de «The 99» advierten de que no es un cómic exclusivo para musulmanes: «Hablamos de valores que también son propios del cristianismo y del judaísmo porque son ideas y conceptos humanos», indicó Housni. Por ese motivo, «los 99 no sólo son de países árabes, sino también estadounidenses, canadienses y portugueses, entre otros». E incluso en apariencia recuerda a los tebeos occidentales, porque su objetivo es competir con otras publicaciones como la saga de «Spiderman» y de «Batman». Así, quien se espere un cómic con personajes árabes que recen, vayan a la Meca y practiquen el ayuno se sentirá decepcionado porque «no es un tebeo religioso», ya que habla del Islam como una cultura con sus ideas y conceptos, que afecta a los humanos. Lo que sí abundan son las intrigas, los golpes, los mamporros y los superpoderes fantásticos, como en cualquier otro cómic.
S.S.