UGT prefiere la «unidad sindical», pero iniciará protestas en solitario
El 4º Comité Nacional de UGT Euskadi abordó el debate de la negociación colectiva desde «una perspectiva posibilista», como explicó su secretario general, Dámaso Casado. Prefiere la unidad sindical, pero, mientras no se logre, protestará en solitario. En materia de seguridad y salud laboral apuesta por potenciar la figura de agentes de salud territoriales.
Juanjo BASTERRA |
El secretario general de UGT Euskadi, Dámaso Casado, considera que es necesario que en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa se potencie el diálogo social a partir del Gobierno de Lakua para «lograr avances que se están produciendo a nivel estatal en materias de contratación, de salud laboral y de negociación colectiva». Una de las principales directrices que acordó el 4º Comité Nacional de UGT Euskadi fue «seguir buscando la unidad sindical» para «desbloquear la negociación colectiva sectorial en la que el 64% de los trabajadores no ha conseguido aún actualizar su convenio». Ese porcentaje se eleva al 84%, según Casado, en Gipuzkoa.
El dirigente sindical reconoció el fracaso de su iniciativa de realizar un paro de veinticuatro horas en todos los sectores que no tienen convenios cerrados, pero advirtió que UGT Euskadi continuará en esa línea «para avanzar en la negociación colectiva y el diálogo social para hacer frente a los empresarios». Por lo que concretó que llevarán adelante movilizaciones en solitario en el Metal de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa; en Comercio y en Oficinas y Despachos de Bizkaia y Gipuzkoa, y en el de Construción de Gipuzkoa. «Haremos manifestaciones y concentraciones ante las patronales este mes». Otro elemento fundamental que destacó Casado fue la actividad reivindicativa en materia de seguridad y salud en el trabajo.
El líder de UGT Euskadi afirmó que «existe un déficit» y añadió que «la situación en la comunidad vasca no es alentadora». Criticó la elevada accidentabilidad que se produce en los centros de trabajo y afirmó que «falta el desarrollo de la nueva normativa de las enfermedades profesionales». A este respecto, acusó a las mutuas, a los empresarios y a Osakidetza de no actuar con ahínco en esa materia tan importante.
«Creemos que es necesario que el Gobierno vasco lidere un acuerdo sobre el Plan Director en materia de Salud Laboral 2007 a 2011 con los agentes sociales, porque sólo con un diálogo social se puede poner freno a esta lacra que sufrimos los trabajadores». En este caso recordó que en el conjunto del Estado español, el Ministerio español de Trabajo, la CEOE y CCOO y UGT han alcanzado un acuerdo a ese respecto. «El dato, quizá más importante y que se ratificará la próxima semana en la Comisión estatal de Salud, es la puesta en marcha de medidas concretas y claras para disminuir los accidentes». Entre ellas, Casado resaltó el acuerdo para elevar el número de inspectores de trabajo, que en el Estado español representan la mitad de la media comunitaria, y «la puesta en marcha generalizada de seis agentes de salud laboral por cada territorio para cubrir las empresas donde no existe representación sindical». Según los datos del secretario general de UGT Euskadi la carencia se eleva al 40% de los centros de trabajo, que no tienen delegados sindicales y «están desprotegidos».
El último informe del Consejo de Relaciones Laborales confirma, al cierre de abril, que existen 380.945 trabajadores en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa que tienen pendiente la firma de los convenios.
Sólo han registrado en los cuatro primeros meses un total de 15.629 trabajadores. De los que restan por firmar, la mayoría 325.805 trabajadores dependen de convenios sectoriales.
De los convenios vigentes en la CAV, aunque también estén involucrados empleados que dependan del ámbito estatal, mantienen un crecimiento medio salarial del 3,49%, por encima del 2,88% estatal. La jornada media está en 1.715 horas y en el Estado llega a 1.756 horas. De los firmados este año el aumento salarial es del 3,31% y una jornada de 1.693 horas. J. BASTERRA