CALENTANDO BANQUILLO
Es la hora de pagar las apuestas
Imanol INTZIARTE
Se acabó? Según cómo se mire. En esto del balompié, una temporada comienza en el momento en el que el árbitro pita el final del partido de la temporada anterior.
En lo deportivo todavía nos quedan cosas por ver y contar. Ahí tenemos a nuestra selección en Venezuela, donde mañana va a disputar un partido amistoso contra el combinado local. Y todavía falta por desvelarse si el Eibar acompañará a partir de agosto al Alavés y a la Real en Segunda División.
Ay, la Real. Cuántas apuestas se habrán cruzado durante estos últimos meses sobre si bajaba o se quedaba en Primera. Y lo mismo sobre el Athletic. Ha llegado el momento de pagar, y cobrar, esos bocatas, potes, cenas... que se habían jugado en el fragor de una conversación.
Algunos abonarán gustosos la cuenta, en el caso de que su equipo se haya finalmente salvado. A otros, el acierto el pronóstico les quitará en parte -en muy poca parte, creo- el mal sabor de boca que dejan los disgustos. Hay victorias amargas y derrotas felices.
También ha llegado la hora de cumplir las promesas. Esa peregrinación descalzos desde El Arenal hasta la punta del Pagasarri si el Athletic se salvaba, ese estar sin probar un sorbo de cerveza durante todo el veranito... Más de uno querrá retractarse.
Aunque este tema no lo tengo tan claro. Si los políticos, con lo que cobran, pasan de cumplir lo que anuncian en campaña, ¿qué nos obliga al resto de los mortales a pasar por el aro?
Dejo para el final el tema que nos va a marcar el ritmo durante las próximas semanas. En Ibaigane y Zubieta han comenzado las carreras, con distintos formatos, por alcanzar o mantener el sillón presidencial. Me atrevo a augurar que, vista la temporada deportiva, los cruces de acusaciones van a ser de órdago.