El secretario de política municipal del PSOE, Alvaro Cuesta, decía sobre el alcalde de Sartaguda que «no se merece llamarse socialista». Y yo me pregunto: ¿qué entiende por socialista ese señor? ¿Acaso rendirle honores a Condoleezza? ¿Articular una banda de matones a sueldo como el GAL? ¿Permitir la especulación y todo lo que conlleva un sistema capitalista-monopolista? ¿Ilegalizar ideas políticas, etc.? ¿Eso es lo que entiende el señor Alvaro Cuesta por ser socialista?

Pues que sepa que el nuevo alcalde de Sartaguda ha dado una lección a todos esos sociatas de pacotilla, enfrentándose a la derecha fascista (incluso de su partido) codo con codo con otro partido de izquierdas, léase ANV, como hicieron hace 70 años los batallones de ambas organizaciones en contra del alzamiento franquista.

Este es el ejemplo que debería cundir en toda Euskal Herria para desbancar de una vez por todas a las derechas en pueblos y ciudades (PP, PNV, UPN) y dejarnos decidir de una vez el futuro de este pueblo.