Llega a Donostia la luz y el brillo de los Rolling Stones
La magia del circo del rock
Demostrando que los mitos nunca mueren, los abuelos Stones siguen entusiasmando a un público multigeneracional con un mastodóntico espectáculo difícilmente superable en cuanto a magnitud. Convertida en un acto social más que en celebración rock, la maquinaria más lucrativa del negocio musical visita por primera vez Donostia.
Anartz BILBAO | BILBO
¿Por qué, tras más de cuarenta años de carrera en la que han acumulado fama, leyenda y fortuna, siguen los Rolling Stones en la carretera? Esa parece ser la pregunta del millón. El cuarteto, que no sufre de alopecia ni cultiva barriga, acumula 250 años de tóxica existencia y sigue paseándola con irónica sonrisa alrededor del planeta.
Los coetáneos Shakespeare y Axular dejaron escrito en dos de sus obras más importantes que «a la piedra que rueda no se le adhiere el musgo». Cuatro siglos después Dylan lo cantaría en la celebre «Like a Rolling Stone» de «Highway 61 Revisited», en 1965. Para entonces, la banda pionera de la british invasion forjaba su leyenda.
Las Satánicas Majestades se inspiraron en un tema del mítico Muddy Waters -«Rolling Stones blues»- para bautizar a principios de la década de los 60 al grupo que, en 1969, Jagger autodenominaría como «la banda de rock más grande del mundo». Mick Jagger, Keith Richards, Jack Taylor y Brian Jones fueron los «mecánicos» del artefacto sonoro que tocó en directo por primera vez en el Marquee Club de Londres el 12 de julio de 1962, al que pronto se incorporarían Charlie Watts y, en 1974, el ex Small Faces Ron Wood.
Gloriosos 60
La banda debutó en 1964 con un álbum homónimo y un año después publicaron «Rolling Stones2», donde aparecería el ya inmortal himno «Satisfaction».
Los siguientes tocaron techo creativo y los convirtieron en referente mundial. Citemos los principales. «Aftermath» (1965), contemporáneo del «Rubber Soul», de The Beatles, y del «Blonde on Blonde», de Bob Dylan, supuso una de sus cumbres creativas y los puso al par de los fab. four de Liverpool. En 1967, publicaron «Their Satanic Majesties request», trabajo que les dió sobrenombre y por el que incluso Lennon y McCartney los acusaron de copiarles. Un año después llegó el imprescindible «Beggars Banquet», precedido del single «Jumpin' Jack Flash», mientras las adicciones de Brian Jones y Keith Richards, el automedicado más famoso del planeta, se agravaban. El productor Jimmy Miller empezó a colaborar con ellos en este álbum en el que recuperarían su querencia por el blues y que contenía gemas como «Sympathy for the Devil». Algo más tarde Brian Jones fue encontrado muerto sumergido en la piscina de su casa y fue sustituido en la banda por Mick Taylor, quien fue sustituido a su vez por el guitarrista Ron Wood.
Luminaria del firmamento rock, en noviembre de 1969 la banda se embarcó en una accidentada gira americana en la que sufrieron el archiconocido incidente de Altamont, en el que los Ángeles del Infierno, contratados como seguridad, mataron a un chico de color que asistía al macrofestival, hecho por el que se dice que estuvieron varios años sin tocar en directo «Sympathy for the Devil». Ese mismo año facturaron «Let it Bleed», obra capital en la que colaboró Ry Cooder. El lp presentaba temas como «Gimme Shelter» y fue grabado con el politoxicómano Keith Richards totalmente puesto de caballo. Célebre es su frase: «Nunca he tenido problemas con la droga, sino con la Policía».
El «Sticky Fingers» del 71 fue el primer trabajo publicado en su propio sello. El disco del paquete vaquero en la portada supuso su lanzamiento más exitoso y contenía temas como «Brown Sugar» o «Wild Horses».
Famosa por sus escándalos y detenciones, indudablemente la banda ha compuesto algunos de los más brillantes y maravillosos temas de rock & roll, apoyada en la enérgica puesta en escena de Mick Jagger y el personal estilo del guitarrista Keith Richards, cuyos riffs han sido imitados hasta la saciedad.
La banda ha seguido publicando y lanzando rentables productos periódicamente, «A Bigger Band» (2005) es el último y goza de una salud excelente, después de sus curas de hemodiálisis a las que se han sometido, erróneamente conocidas popularmente como «el cambios de sangre».
Y «A Bigger Band» está a punto de llegar a Donostia. Ese es el nombre de la gira que los acercará por primera vez a la capital guipuzcoana y la que, sin usar el superlativo, la denomina como «la más grande», quizás porque no tiene con quién compararse (han sobrevivido a The Beatles).
Organizada por la promotora bilbaina Rock Star, que se afana para que el abrumador montaje esté perfecto para el sábado, y tras vender más de 30.000 entradas, aún quedan unas 9.000 a la venta. Desde hoy, aparte de en internet, se realizarán las ventas en las taquillas de Anoeta, con horario de mañana y tarde. El público de Ipar Euskal Herria tiene la posibilidad de comprar las entradas en Mattin Megadenda de Baiona.
La banda, que tiene en Madrid el centro de operaciones, viajará en avión privado el mismo día del concierto y, aunque no tiene previsto pernoctar en Donostia, ha reservado habitaciones en el hotel María Cristina.
La noche de San Juan comienza con Centtric (19.30 h.), sigue con el cantante de origen sudafricano Arno Carstens (20.30 h.) -quien ha actuado junto a Lenny Kravitz , R.E.M. o Metallica- y finalizará con el sonido y la pirotecnia de los abuelos más marchosos del rock. La cita con ellos, a las 22.00 h.
Aunque más de uno ha especulado con que esta podría ser la última gran gira de la maquinaria Stones, la banda liderada por el binomio Jagger-Richard lleva más de cuatro decadas iluminada por los focos y no parece poder vivir sin ello, por lo que seguirán en ruta.
Tras vender casi 11.000 entradas el primer día, aún quedan unas 9.000 disponibles en internet y en las taquillas del estadio -donde comenzarán a venderse a partir de hoy-. Los organizadores esperan rozar el lleno y acercarse a los 40.000 espectadores con el impulso de última hora.
Fecha: Sábado 23.
Lugar: Estadio de Anoeta (Donostia).
Hora: Zenttric (19.30 h.) + Arno Carstens (20.30 h.) + Rolling Stones (22.00 h.).
Precio: 65 a 165 euros.
El cuarteto bilbaino Zenttric, que lleva un año en los escenarios y ha ofrecido 25 directos, ha sido elegido para actuar de telonero en Donostia. Al habla con el vocalista Gutxi, este se muestra sorprendido del «premio» recibido. Con la firme intención de abrirse un hueco en la escena musical, la banda factura un indie rock actual de corte británico, enérgico y vitaminado, que ha cosechado muy buena aceptación en el portal myspace/centtricband. Acaban de grabar el master de su debut y ahora lo mueven de sello en sello. Aunque aún no conocen el programa concreto del sábado, preparan seis de sus temas mas intensos y movidos con la intención de ir calentando el anochecer de Anoeta y no desaprovechar la histórica ocasión brindada por los Stones.
A. BILBAO