La crisis que la patronal alavesa SEA lleva lastrando desde hace más de un año se ha agudizado en las elecciones para la renovación de la Junta Rectora y el enfrentamiento ha subido de tono ante la elección del presidente, que corresponderá a esta nueva Junta.

Dos sectores pugnan por el control de la agrupación patronal. Uno de ellos, el denominado «renovador» o «crítico» presentará un candidato, pero el otro, continuista con la línea del hasta ahora presidente, Carlos Zarceño, no tiene intención de ponerlo fácil y ha planteado sus exigencias para no bloquear el funcionamiento de SEA.

Desde este sector, el hasta ahora vicepresidente de SEA Alfonso Sáiz, criticó que el enfrentamiento se haya hecho público y reclamó un acuerdo entre las empresas que representan al sector industrial para desbloquear la crisis.

Con ese motivo, convocó una reunión de este sector a la que no asistieron las empresas del sector crítico. El problema es que los críticos ni siquiera aceptan que tenga capacidad para realizar estas convocatorias ya que no le reconocen el cargo de «presidente en funciones».

Sáiz aseguró ayer que los estatutos de SEA le avalan como tal. Pero el sector crítico señala que ocupa un cargo de libre de designación del anterior presidente y que debería haber cesado con él. Así las cosas, está en duda hasta su potestad de convocar la junta que elegirá al presidente. Sáiz aseguró que lo hará el próximo 18 ó 19 de junio y anunció que ayer mismo le fue comunicada la presentación de la candidatura del sector crítico.

Aunque no desveló su nombre o empresa, aseguró que «no es el que tenían en mente». Aseguró que el sector oficialista no presentará candidato, pero advirtió de que si no se alcanza un pacto en el sector industrial, el nuevo presidente puede tener muy difícil su gestión, al necesitar al menos dos tercios de los votos para sacar adelante temas importantes. Por ello condicionó el «trabajar con lealtad» y el apoyo al nuevo presidente a «solucionar los problemas en Industria».

Con ello, pretende que los críticos del sector industrial se avengan a un pacto y renuncien a formar mayorías con los de Servicios o la Construcción. Además, criticó abiertamente al presidente de Caja Vital, Gregorio Rojo, cabeza visible de los críticos a la anterior junta.

«No me voy a reunir con el señor Rojo para tratar temas de Industria», insistió. Afirmó que intentará convocar otra reunión de los representantes de este sector, donde reclamó «propuestas concretas», en temas de relaciones laborales, formación, medio ambiente, balance fiscal, empresa familiar, fiscalidad e impuesto de sociedades, la necesidad de mano de obra especializada, la reclamación de infraestructuras o el aumento de jornada en el convenio del Metal. «No es posible que ningún presidente pueda desarrollar el trabajo si no están solucionados los problemas del sector mayoritario, porque para cualquier decisión importante se necesitan dos tercios de los miembros de junta», indicó.

Mayorías

Sin embargo, el sector crítico no es sólo Gregorio Rojo o el sector Servicios, sino que en Industria es poco probable que exista un voto común. Según el propio Sáiz cuenta con siete representantes frente a los 13 oficialistas. Sin embargo, dos de estos últimos fueron nombrados por el anterior presidente, con lo que se cuestiona si pueden participar en la nueva junta.

El sector Servicios cuenta con cinco representantes y la Construcción con otros cinco. En total, 28 ó 30 miembros, según las cuentas de uno u otro sector. Sin contar con la Construcción, el reparto sería de 12 a 11 a favor de los críticos, según éstos.

«No estamos dispuestos a ceder trabajos estratégicos para nuestras empresas», insistió Saiz y subrayó como fundamental que el sector Industrial se encargue de los temas de fiscalidad, mano de obra y del conocimiento .

Esta fue su condición para dar su apoyo al próximo presidente. Aseguró que continuará en el cargo hasta que se elija un nuevo presidente. Sin embargo, el sector crítico no reconoce su presidencia en funciones y esgrime un informe jurídico al respecto que Saiz calificó como «una opinión».

Según este informe, la presidenta de SEA debe ser Cristina Ruiz de Apodaca, de la patronal de la Construcción UNECA. «Si no hay arreglo de lealtad en la Industria lo va a tener muy difícil el presidente», advirtió Saiz.