GARA > Idatzia > Hemeroteka

EL CORREO Florencio Domínguez 2007/07/10

El valor de un crimen

El secuestro de Miguel Angel Blanco y su posterior asesinato constituyen el acto terrorista perpetrado por ETA que ha tenido más profundos efectos políticos. Todavía hoy, pasada una década, estamos viviendo las secuelas de la marejada que provocó aquella actuación etarra. Todo lo ocurrido en torno a este triste episodio debería servir para que se mostraran más cautelosos aquellos que afirman que ETA no conseguirá nada con la violencia o que no va a modificar la agenda de los demócratas.

(...) La sociedad vasca se dividió entre nacionalistas y no nacionalistas, el marco político fue cuestionado, la tensión social aumentó, los puentes que hacían posible el entendimiento civil quedaron seriamente deteriorados y la convivencia dañada. (...)

Una década después todavía se mantiene la radicalización de una parte del nacionalismo vasco originada en los episodios que siguieron al asesinato de Miguel Angel Blanco.

No es que ETA tenga capacidad de controlar todas las secuencias posteriores a sus atentados, pero el terrorismo, en contra de lo que algunos creen, se ha revelado como un instrumento útil para condicionar la política en el País Vasco. Fue útil hace diez años y lo sigue siendo ahora. Todo depende de cómo los demás reaccionen ante ETA.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo