Una manifestación recorre Bilbo en denuncia de la tortura y la represión
Decenas de personas se manifestaron ayer en Bilbo con objeto de denunciar la «apuesta represiva» de los Estados español y francés. Allí recordaron que cada dos días se encarcela a un ciudadano vasco.
GARA |
La defensa de los derechos de los presos políticos vascos no remite durante el verano; como tampoco lo hacen las muestras de repulsa a las detenciones y a los malos tratos. Como muestra de ello, decenas de personas recorrieron ayer en manifestación las calles de Bilbo.
Bajo el lema «Hau ez da demokrazia!», el movimiento pro amnistía denunció «la clara apuesta represiva» de los Estados español y francés.
En la comparecencia realizada para convocar esta manifestación, los representantes del organismo antirepresivo recordaron que desde el pasado 1 de junio cada dos días se ha encarcelado a un ciudadano vasco, lo que da el escalofriante balance de 20 aprisionados. A su juicio, estos datos reafirman «la estrategia de guerra» adoptada por los estados; «donde todo vale contra una parte muy importante de la sociedad vasca» apostillaron.
Ante todo ello, en la manifestación que recorrió las calles de Bilbo, el movimiento pro amnistía afirmó que «la única solución es la derogación de la Ley Antiterrorista y de los Tribunales especiales». El protocolo puesto en marcha por orden del magistrado Baltasar Garzón de cara al tratamiento a las personas detenidas, también fue objeto de valoración. A juicio del movimiento pro amnistía, es una «pequeña victoria de la presión popular de Euskal Herria», pero subrayaron que esta medida no es suficiente para poner fin a la tortura.
Diversas movilizaciones
Por otro lado, como cada viernes, fueron numerosos los puntos del país en los que se realizaron concentraciones y encarteladas en favor de los prisioneros vascos. En Arbizu por ejemplo fueron 30 los vecinos congregados; en Lizarra fueron 47, y 40 en Amurrio. 250 personas se congregaron en Hernani; 65 en Soraluze, 40 en Elgoibar, 283 en Gasteiz, 232 en Iruñea, 32 en Lezo, 72 en Lazkao, 87 en Zornotza, 15 en Gatika, 33 en Antzuola, 70 en Eibar, 24 en Mundaka, 56 en Bergara, 31 en Ugao, 57 en Tafalla, 26 en Getaria, 40 en Deba, 25 en Bera y otros 45 en Etxarri-Aranatz.
En Lizartza por su parte, 75 personas se concentraron en contra de la «ocupación militar» que sufre el pueblo y en denuncia de la actitud mantenida por la actual alcaldesa, Regina Otaola, a la que invitaron a que se marchara de la localidad.
Tras el rechazo hace unas semanas por parte de la Corte de Aplicación de Penas del Tribunal de Apelación de París de la petición de libertad condicional interpuesta por Jon Parot, su abogado Didier Rouget ha informado de que el preso político vasco deberá esperar un año antes de volver a presentar otra solicitud.
Rouget ha manifestado que los dos motivos alegados por el tribunal -proyecto de vida en el exterior deficiente y no haber cortado su relación con el movimiento vasco- son argumentos que no se sostienen porque el propio servicio de inserción penitenciaria calificó de «seria» la oferta de trabajo y de alojamiento realizados por dos organismos de Angoulême homologados por el Ministerio de Justicia.
Además, el letrado estima que algunas de las opiniones manifestadas en la vista del recurso no tienen base jurídica, entre ellas, la del fiscal de Toulouse que considera «prematura» la demanda tras 16 años de prisión o la del fiscal de Angoulême que se opuso a la libertad subrayando la presencia de «activistas de ETA» en la región.
A.M.