Dice el señor Arambarri que a la izquierda abertzale se la ve más virulenta que en los tiempos en los cuales él fue alcalde. Recuerde el señor Arambarri que el pueblo de Ondarroa no le ha elegido como alcalde. Recuerde también que a la izquierda abertzale le han negado la voz durante cuatro años, y que él piensa negársela durante otros cuatro.

Recuerde el señor Aramba-rri, también, que ha entrado en la alcaldía de la mano de una ley que fue inventada por un señor, o señores, que votaron para que la guerra de Irak tuviese lugar, una guerra que ya ha causado miles y miles de muertos (la cifra de muertos de la «guerra civil» está ya superada).

Dice usted que no se siente paracaidista, y yo le creo. Usted no es paracaidista, usted es uno de los mejores representantes de la causa española en Euskal Herria.