Losdelgás es un sexteto de butaneros con el actor gasteiztarra Gorka Aginagalde como frontman. La formación se completa con el batería Javier Area, el bajista Ritxi Salaberria, los guitarristas Xanet Arozena y Sergio Callejo y L. M. Moreno Pirata en la voz, los teclados, la armónica y el saxo.

Hablamos con este último, alma mater musical de estos amantes del circo, para conocer las fechorías de la banda. «Somos una cuadrilla de energúmenos sin fundamento que va a los conciertos a pasarselo bien y a que la gente se lo pase tan bien como nosotros», nos cuenta, a pesar de que la banda la conformen músicos profesionales: «No es incompatible hacer las cosas bien y que suene a cachondeo. Muchas veces se asocia la juerga con el desparrame, sacar todo de quicio, pero no tiene porqué. Nosotros hacemos juerga y cachondeo, pero la música está bien currada». La cuadrilla butanera -con buzos naranjas ajados de tanto tocar-, no para de brincar en directo y su verano se presenta caliente. Como ejemplo, basta decir que esta semana actúan en Agoitz, Leitza y Aretxabaleta. «Llevamos un verano bastante bueno, en agosto tenemos una docena de actuaciones y en setiembre otro tanto».

El sexteto de Errenteria publicó su debut «El Cedé» con la colaboración de Alfredo Piedrafita y El Drogas de Barricada, Kutxi Romero de Marea, Juan de S.A. y Mitxel Ortega de Mitxel y los Renos: «Las colaboraciones salieron espontáneas, no fueron intencionadas». Catorce temas de rock & roll canalla y alguna que otra curiosa revisión como «Yolanda», de Pablo Milanés, o «Si fuese Picolo», absurda versión del «Just a Gigoló» que cuenta con su exitoso videoclip en el portal <www.youtube.com>.

Todavía no viven del cuento, pero están en ello: «Estamos currando los temas de nuestro próximo disco que esperamos salga para invierno. Con el primer cd hemos tenido algún problema de distribución, pero básicamente nuestro fuerte es el directo, en el que la gente se queda flipada... y nosotros también». Incidimos en el tema del directo: «Cada concierto es una sorpresa y siempre hay algo nuevo. Antes íbamos a los conciertos a divertirnos y a saltar. Ahora hay demasiado `músico estatua', que toca muy bien pero no hace más que poner la pose y estar paradito. Nosotros queremos que la gente se divierta y salte, que sea una fiesta, por lo que en directo no paramos». Las letras son ácidas e irónicas y su inspiración viene «de lo que hay por ahí. Solamente leyendo la prensa se pueden sacar temas a punta y pala».

Menos profesionales y más salvajes son los verbeneros Feos pero Majos, según ellos herederos de Joselu Anaiak y de Egan. Es una banda que nació para desaparecer y en ello andan. Los han calificado de golfos, parranderos y sinvergüenzas; y se jactan de ello. Surgieron en Ugao en 2003 para desaparecer ese mismo año y volver al siguiente para la despedida. En 2006, por petición popular, resucitan para despedirse de la despedida y actualmente presentan una apoteósica gira funeral final.

Gorka, Arkaitz, Ciro, Julen, Arey, Asier y Unai forman la pandilla que en directo se disfraza lo más ridículamente posible para interpretar encima del tablado versiones de nuestras ya clásicas bandas de punk rock tanto musical como teatralmente, con irónicas y críticas letras a todo lo políticamente correcto.

Parecida propuesta es la que ofrece la Orkresta Itinerante, que no necesita tablado ni enchufes para ir de bar en bar de kalejira. Herederos de aquel monstruo llamado Electrotuna que el Dr. Endika creó en sus laboratorios de Santutxu, barrio de Bilbo, el nuevo experimento nace al disolverse la tuna eléctrica el pasado setiembre.

Actualmente la cresta musical está formada por Koke (voces y berridos), Asier (caja), Gorka (bombo), Arkaitz y Becker (guitarra), Gamix (bajo) e Itxaso (coros). Entre versiones de todo tipo, presentan como novedad un tema de los Dead Kennedys y una vuelta de tuerca más de la versión que Los del Páramo hicieron de un tema de Pink Floyd.

La orquesta más golfa, punky y gamberra del universo se presenta con tres formatos o personalidades (según los disfraces). Así, podemos disfrutar de la Julai Alai Orkresta, con todos los componentes vestidos elegantemente con traje y corbata y una capucha naranja con cresta incorporada en la cabeza. También existe la versión mad max con pinchos de látex. Nos referimos, cómo no, a la futurista Orkresta Kostra. Para finalizar, la impresionante y temida Orkresta Nacional. Compuesta por todo tipo de fachas rancios, como curas, picoletos y demás, son el terror de toda fiesta popular.

Son tres ejemplos festivos que mezclan disfraces, teatro y música para disfrutar del caluroso verano de una manera irónica, crítica y reivindicativa, con mucho humor y poca vergüenza.