Gloria Rekarte Ex presa política
Alerta roja: misiles en Libia
¿Los países «democráticos», los que pueden tener misiles nucleares sin causar pavor internacional, piensan utilizarlos sólo para hacer tiro al plato?
El PS francés se muestra preocupado sobremanera por la naturaleza de las relaciones de Francia con un estado que desprecia los derechos humanos y las reglas internacionales. ¡Hala!, pensé, ¡EEUU! Pues no: Libia. Libia, a quienes las buenas gentes preocupadas por los derechos humanos y el respeto a las reglas internacionales han tenido durante un tiempo aparcada en el trastero, ha retomado el lugar que le corresponde entre los demonios del planeta merced al más que espinoso caso de las enfermeras búlgaras.
La condena a muerte de las cinco enfermeras y la de un médico (palestino de nacimiento, búlgaro de nacionalidad) hizo convulsionarse a la sensibilidad internacional, de normal tan sosegada y serena con, por ejemplo, las condenas a muerte en EEUU (claro que muy civilizadamente las dictan de una en una y no en paquetes de a seis); o con los palestinos asesinados a diario en cualquier lugar al que balas, tanques y misiles israelíes tengan acceso. O con los 400 niños a quienes se inoculó, ya sea de forma voluntaria o accidental, un virus que puede ser mortal y a quienes la sensibilidad internacional no se ha acercado todavía.
Volviendo a la noticia, el PS francés ha solicitado incluso la formación de una comisión de investigación parlamentaria ante la sospecha de que la contrapartida a la liberación de los seis condenados haya sido el acuerdo de venta de armamento a Libia que el propio Sarkozi firmó en Trípoli. Lucrativa la mediación, ¿eh? Sí, bueno, años de «colaboración antiterrorista» han tenido que brindarle al Estado francés agilidad y soltura mercantil. Pero no parece ser este hecho en sí el que inquieta e indigna al PS, sino el hecho de que artefactos nucleares y de guerra hayan ido a caer en manos de Libia, cuyo desprecio a derechos humanos y normas internacionales es harto conocido y ha quedado más que probado cuando Seif el Islam ha reconocido que los prisioneros fueron torturados. Cosa que en ningún Estado democrático ocurre, porque la picana, la bolsa, las palizas, las violaciones y las amenazas contra familiares son mentiras puñeteras que obedecen a consignas, razón por la cual el PS puede evitarse el trabajo de mirar por encima de los Pirineos.
En todo caso, lo que no termino de entender es cómo se conjugan en armonía derechos humanos y misiles. ¿Los países «democráticos», los que pueden tener misiles nucleares sin causar pavor internacional, piensan utilizarlos sólo para hacer tiro al plato? ¿O los dispararan, pero pidiéndole antes a la ciudadanía que se aparte, que van? ¿O harán trizas a los humanos, pero con todo el respeto a sus derechos, no como los otros que harán lo mismo pero sin respeto ni nada? Puede ser por mi desconocimiento de las reglas internacionales al respecto. No tengo ni la menor idea de cómo está regulado internacionalmente esto de la tecnología nuclear y los misiles, quiénes son los que dado el caso tienen que dejarse coser a misilazos y porqué, y quiénes (además de EEUU e Israel) y porqué, los que detentan el derecho divino de misilear a los demás.