Carga contra la multitud en Donostia
El movimiento pro-amnistía denuncia el intento de sacar de la calle a la izquierda abertzale
El movimiento pro-amnistía no dudó a la hora de señalar al PNV «como máximo responsable» de los incidentes registrados el domingo, a la vez que aseguraba que estos hechos «se sitúan dentro del guión suscrito por Rubalcaba e Imaz para profundizar en la guerra». Tras asegurar que es «tiempo de plantarse ante el PNV», llamaron a participar en las concentraciones que realizaran el jueves frente a todos los batzokis.
Oihana LLORENTE |
Diez manifestantes heridos que requirieron ayuda sanitaria -dos de ellos continúan aún ingresados en el hospital y uno con pronóstico de gravedad-; cientos de contusiones y 9 personas detenidas. Ese es el desolador balance de una manifestación que pretendía ser pacífica en favor de la amnistía y la autodeterminación.
El movimiento pro-amnistía no dudó en responsabilizar al PNV de la batalla campal acaecida el domingo en la capital guipuzcoana y es por ello por lo que integrantes de diversas organizaciones que componen este movimiento junto a algunos de los heridos por la carga policial y varios allegados de presos políticos vascos se dieron cita durante la tarde de ayer ante la sede que la formación jeltzale tiene en Donostia.
«Golpear, amedrentar, reprimir y silenciar las personas comprometidas con este país y de las reivindicaciones democráticas más básicas». Esas fueron las palabras utilizadas por Oihana Agirre, portavoz del movimiento pro-amnistía, para describir lo ocurrido el día anterior a pocos metros de donde se encontraba.
El movimiento pro-amnistía, que dirigió todas sus miradas hacia el PNV, acusó a el Gobierno de Juan José Ibarretxe de «seguir el guión escrito en Madrid y suscrito por el líder jeltzale, Josu Jon Imaz, y el ministro de Interior español Alfredo Perez Rubalcaba».
A su juicio, el inquilino de Ajuria-Enea marcó el día 9 de setiembre en rojo en su particular calendario, situandolo como «el momento preciso para tratar de agachar la cabeza de la izquierda abertzale y del movimiento antirepresivo».
Explicó además, que este plan diseñado en Madrid tiene como finalidad «seguir negando la palabra y el derecho a decidir de Euskal Herria». Fue más allá y aseguró que este esquema está dirigido para «profundizar la estrategia de la represión y de la guerra».
Agirre, que compareció arropada por numerosas personas que portaban escalofriantes imágenes de contusionados y detenidos, denunció que los incidentes ocurridos el domingo estaban «más que previstos»; y valoró en este sentido que los altercados estaban «planificados por Balza y demás responsables de la Ertzaintza siguiendo fielmente las instrucciones políticas del PNV».
Agirre recordó lo ocurrido el día anterior a pocos metros de donde estaban ayer. Afirmó que mientras cientos de personas abarrotaban el Boulevard donostiarra en una jornada festiva, dos centenares de ertzainas lo ocuparon para «sembrar el pánico» entre la población y «extender la idea de que están dispuestos a hacer cualquier cosa, incluidas la mayores atrocidades, con un único propósito: sacar a la izquierda abertzale de la calle».
La portavoz del movimiento pro-amnistía aseguró que la actuación de la Policía de Balza tuvo como objetivo «asociar la actividad política de la izquierda abertzale con unos incidentes provocados desde Lakua con premeditación». Agirre, en un tono irónico, felicitó al consejero Balza por acertar en su pronostico al vetar la manifestación argumentado que habría altercados. El movimiento pro-amnistía señaló directamente a Lakua como responsable de los incidentes, ya que a su juicio fue Lakua quien envió a la Ertzaintza a «detener y machacar abertzales y a negar la libertad de expresión a favor de los presos políticos vascos».
Al entender del movimiento antirrepresivo a día de hoy Euskal Herria vive un nuevo salto represivo. Una estrategia que a su entender no es más que «una vieja receta realizada en Madrid con la vana esperanza de conseguir liquidar la voluntad de lucha de este pueblo».
El movimiento pro-amnistía denunció que mientras Ibarretxe y el PNV «llenan su boca hablando de dar la palabra al pueblo, en realidad se la arrebatan por la fuerza».
Agirre con un tono de indignación palpable en su voz emplazó de manera directa al PNV con un contundente «¡basta ya!». Señaló que la formación dirigida por Imaz debe renunciar «a servirse de la represión como herramienta política y defender los intereses de España por medio de la violencia y el salvajismo policial de la Ertzaintza». En este sentido, explicó que es tiempo de «plantarse frente al PNV», por lo que animó a toda la ciudadanía a participar en las concentraciones que el jueves a las siete de la tarde llevaran a cabo ante todos los batzokis de Euskal Herria.
Aplausos a la Ertzaintza
Mientras que en Euskal Herria la carga policial era duramente criticada, el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, se congratuló por el «buen trabajo» de la Ertzaintza. En esta línea se expresó también el delegado del Gobierno español en la CAV, Paulino Luesma, que señaló que la izquierda abertzale mostró «brutalmente su falta de respeto a la convivencia».
Luesma explicó que se vivió un «enfrentamiento anunciado, provocado y calculado» que alteraron gravemente la convivencia ciudadana.
El alcalde de Donostia Odon Elorza, como suele ser habitual en él, tampoco perdió la oportunidad de salir a la palestra y expresar su «repudio y condena» por los incidentes ocurridos en la capital guipuzcoana. Elorza consideró que la Policía autonómica estuvo, «sin duda a la altura de las circunstancias».
La presidenta del PP en Gipuzkoa, María José Usandizaga, condenó los incidentes y señaló que «sólo se acabará con esa gente -haciendo referencia a la izquierda abertzale- desde el Estado de Derecho y con la aplicación de la Ley».
Después de la carga policial una persona fue ingresada en el hospital Donostia con un ataque al corazón y ayer seguía en la U.V.I con pronóstico grave.
El preso político Urtzi Murueta será hoy estraditado del Estado francés al Estado español. En denuncia de esta nueva entrega el movimiento pro-amnistía realizará una movilización que partirá hoy a las 20.00 desde el Boulevard de Leioa, su localidad natal.
Tras pasar a disposición del Juzgado de Guardia de Donostia para prestar declaración, Juan Mari Olano junto a los otros ocho detenidos en la manifestación del domingo quedó en libertad. No obstante, según precisó la Consejería de Interior dirigida por Javier Balza, Olano fue detenido de nuevo inmediatamente para cumplir la orden dictada por el juez Baltasar Garzón. El miembro del movimiento pro-amnistía deberá acudir hoy a declarar ante la Audiencia Nacional española, ya que el juez ha ordenado que comparezca en su juzgado después de que lo solicitara la Fiscalía del tribunal especial. El Ministerio público podría pedir su ingreso en prisión por «reincidir en delitos» por los que ya está procesado y por vulnerar «la suspensión de actividades de Askatasuna».
Horas antes, la Fiscalía de la Audiencia Nacional española pidió a Garzón que ordenase a la Policía autonómica el traslado del portavoz del movimiento antirrepresivo para que se le fuera tomada declaración. En el escrito, el fiscal Carlos Bautista señala que Juan Mari Olano se encuentra en libertad bajo fianza de 60.000 euros por la causa abierta contra Gestoras pro-Amnistía y Askatasuna.
En esta línea afirma que Olano podía «haber reiterado la comisión de un delito de integración en banda armada e infringido la prohibición de suspensión de actividades de Askatasuna».
El magistrado de la Audiencia Nacional española no dudó en su proceder, y nada más tener constancia de la petición de la Fiscalía dio luz verde a la detención de Olano. De esta manera, Garzón solicitó a la Policía autonómica la detención y el traslado a la Audiencia Nacional española para prestar declaración en el marco de las diligencias abiertas en su contra por su pertenencia en la organización Askatasuna.
Desde el movimiento pro-amnistía denunciaron con dureza esta nueva detención de su compañero.
Hoy por su parte, los vecinos de su localidad natal, Zaldibia, realizarán una asamblea informativa para dar cuenta de su situación.
La cita será a las 20.00 en la plaza de la localidad.
Las movilizaciones en favor de los presos no cesan, ayer fueron 55 los que se reunieron en Santurtzi; 25 en Mutriku; 38 en Iurreta y Laudio, 29 en Astigarra, 28 en Berango; 45 en Zaldibia; 11 en Ataun; 28 en Altza y 22 en el barrio bilbaíno de Otxarkoaga.
Todos los detenidos, exceptuando a Juan Mari Olano, quedaron en libertad tras pasar a disposición del Juzgado de Guardia de Donostia, pero deberán personarse en el juzgado cada quince días. No obstante, el Departamento dirigido por Balza remitió el atestado de la Ertzaintza a la Audiencia Nacional y al Juzgado de Donostia, esté fue el que finalmente asumió el caso.
