Hoy se decidirá si Olano sigue en prisión por el sumario de Gestoras
GARA |
El portavoz de Askatasuna Juan Mari Olano fue conducido ayer ante el tribunal de la Audiencia Nacional española que le juzgará próximamente, por su pertenencia a Gestoras pro-Amnistía, después de haber ingresado en prisión por orden del juez Baltasar Garzón tras ser detenido por la Ertzaintza en la manifestación que se intentó celebrar el pasado día 9, en Donostia, con motivo de la disputa de la bandera de La Concha.
La comparecencia de Juan Mari Olano ante la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal se celebró a petición del fiscal Enrique Molina, que considera que el tribunal debe acordar la prisión del portavoz de Askatasuna por la causa por la que será juzgado, y en base a la cual se encontraba hasta el pasado día 9 en libertad bajo fianza de 60.000 euros, independientemente de que Garzón le enviara ya a la cárcel el pasado día 11.
A su llegada, esposado, a la sala de vistas, Olano coincidió con varios ciudadanos vascos y familiares que acudieron a la sede del tribunal especial con motivo de un juicio que se inició ayer. Al ver al portavoz de Askatasuna a través de las ventanillas de una puerta del pasillo, comenzaron a pronunciar gritos de ánimo. En ese momento, los policías que custodiaban a Olano se dirigieron a quienes le mostraban su apoyo y les indicaron que no se podía «alterar el orden», tras lo que se inició la vistilla.
Durante la misma, celebrada con la intención de modificar las medidas cautelares contra el portavoz de Askatasuna y que duró diez minutos, el fiscal pidió prisión, como ya anunció.
«La misma causa»
Por su parte, la defensa de Juan Mari Olano, que fue ejercida por la abogada Amaia Izko, argumentó durante la vistilla que no cabía decretar esa medida porque ya había sido acordada en una causa que, dijo, es la misma por la que será juzgado.
Tras escuchar estos argumentos, a los que Olano no quiso añadir nada más, la Sala acordó postergar hasta hoy su decisión al respecto.
Olano se encuentra en prisión provisional desde el pasado día 11 de setiembre por orden del juez Baltasar Garzón, dos días después de que fuera detenido por la Ertzaintza cuando encabezada una manifestación que pretendió salir del Boulevard donostiarra.
En el marco de unas diligencias previas sobre Askatasuna, Garzón le volvió a acusar de «integración en banda armada» (la misma acusación que pesa sobre él por su pertenencia a Gestoras-Askatasuna). También le acusa de «inducción al terrorismo callejero» durante la manifestación de Donostia en la que cargó la Ertzaintza.