El Festival de Teatro de Gasteiz incluye este fin de semana dos propuestas nada convencionales: por un lado, la del italiano Leo Bassi y su «La revelación», en el escenario principal del certamen y, por otro, la presentación en el centro cívico Lakua de Katu Beltz, una compañía local de reciente creación compuesta por Alberto Huici, Iñaki Rikarte y Alberto Castrillo-Ferrer, tres actores que coincidieron realizando sus estudios de interpretación en Madrid y más tarde en la compañía aragonesa El Gato Negro. Katu beltz se presenta con «Gris mata», una obra tragicómica y absurda dirigida por Charo Amador.

El festival alavés entra así en el grueso de su programación, estructurada a partir de ahora en actuaciones casi diarias y entre las que destaca, por su cercanía de fechas, la visita de unos históricos de la danza contemporánea como Momix. La compañía de Moses Pendleton, que ha hecho de lo onírico su seña de identidad, recalará en el festival la próxima semana (días 9 y 10), dentro de una gira por las capitales de Hego Euskal Herria que arranca esta misma noche en el Baluarte de Iruñea. Tras Gasteiz, viajará a Bilbo y a Donostia.

Pero, aunque es el más importante, este no es el único festival del otoño. Dedicados al teatro euskaldun, aunque de diferente manera, se celebrarán durante la semana próxima un clásico, como las Jornadas de Getxo (llega a su edición número 25), mientras en Nafarroa Beherea arrancará la primera edición del Festival de Teatro Amateur. Mientras en Getxo se podrá ver la producción más reciente de las compañías vascas, en Donibane Garazi buscarán convertirse también en escaparate e impulsores de la producción no profesional en euskara. Y en Baiona y Biarritz, el turno de otro clásico, Les Translatines, un festival dedicado al teatro latinoamericano y de la península que alcanzará su edición número 27. Lo más novedoso de la escena catalana y brasileña, por ejemplo, se darán cita en los numerosos escenarios por los que se extenderá.