LAB y los consejeros de la izquierda abertzale agrupados en Banatuz denunciaron ayer que Kutxa aplicará a partir del 1 de diciembre una subida «abusiva» y «escandalosa» de sus comisiones con el objetivo de generar más beneficios a costa de perjudicar al grueso de sus clientes.

La responsable del área de Servicios de LAB, Olatz Arozena, el de Finanzas, Joxean Urkiola, y el representante de Banatuz José Mari Pérez presentaron las líneas principales de la postura que mantendrán hoy en la Asamblea General de Kutxa.

Exigieron a la entidad que «retire la campaña de escandalosas subidas en las comisiones y bajada de intereses que prevé aplicar desde el 1 de diciembre». Urkiola explicó que la caja «va a aumentar la comisión de mantenimiento de tres a diez euros anuales, en la libreta a la vista, y de 8,5 a 15 en la cuenta dorada -las que utilizan las personas mayores-», y también va a aplicar una nueva comisión que consistirá en cobrar 0,06 euros por cada apunte en una cuenta cuando se superen los 50 apuntes en un trimestre.

Denunciaron también que, a parte de subir las comisiones, Kutxa pretende rebajar los intereses, sobre todo los de las cuentas con un saldo medio inferior a los 6.000 euros, que recibirán un 90% menos de la entidad financiera.

Urkiola indicó que la entidad sostiene que compensará esa reducción con otro tipo de bonificaciones, como las que se otorgan por domiciliar la nómina, pero objetó que ese tipo de beneficios ya se aplicaban antes de la rebaja de los intereses.

Afirmó que todas estas medidas, que ya han sido comunicadas a los clientes por carta, están causando «gran malestar con repercusiones directas en la plantilla que es la que tiene que dar la cara ante las escandalosas subidas de comisiones», mientras sus puestos de trabajo «se precarizan».

Los representante de LAB y Banatuz también denunciaron «las inversiones multimillonarias en negocios inmobiliarios, cuanto menos sospechosas» de Kutxa que «ponen en riesgo y cuestión el fin de la entidad y la confianza de los clientes». Exigieron, por ello, «el abandono de este tipo de inversiones» que no responden «al modelo que tiene que tener una caja que debe servir a la ciudadanía».

Modelo de caja

A preguntas sobre una eventual fusión de BBK, Kutxa y Vital Kutxa, indicaron que ese proyecto responde a «intereses electoralistas de partidos que quieren dirigirlas mejor y no a los fines para los que fueron creadas».

Según señalaron, si se materializa y mantiene «el actual modelo financiero con sus vicios va a tener un mal futuro» ya que es necesario «abordar, negociar y acordar un nuevo modelo de caja más participativo y democrático que recupere la función social» de estas entidades.

«Hay que decir qué modelo de caja queremos y luego decidir» sobre la fusión, porque «si insisten en su modelo actual va a ser un fracaso», manifestaron en la comparecencia.