«Consideramos que Cuba es un mercado que tiene mucho futuro»
Conocedor profundo de las relaciones económicas vasco-cubanas, el presidente de la Asociación de Empresarios Vascos en Cuba subraya la importancia que tiene para ellos conseguir un respaldo financiero.
¿Cuál es su valoración sobre la presencia actual de la empresa vasca en Cuba?
Para nuestras empresas es importante la presencia es este país; muchos de nosotros llevamos muchos años aquí y la realidad nos demuestra que nuestra tecnología y peso en el mercado cubano es ya sustancial. La empresa vasca está muy reconocida.
¿Qué considera que puede aportar la empresa vasca a la economía cubana actual?
En los próximos años la economía cubana va tener cambios sustanciales desde el punto de vista industrial. Nosotros tenemos experiencia tecnológica y de organización en ese tipo de transformaciones.
¿Cómo valoran la situación actual de la economía cubana?
Estamos sorprendidos para bien. Hemos pasado épocas buenas y malas, incluso momentos preocupantes, pero yo diría que hace como tres años que Cuba ha realizado un cambio sustancial a la hora de contratar. En estos momentos son muy serios en lo que quieren comprar y en cómo lo van a pagar. Es un cambio muy positivo que nos ofrece mucha confianza.
¿Es Cuba un mercado con futuro?
Sí, vemos que es un país con bastante futuro en lo que a nuestro trabajo se refiere, además van por unas líneas de trabajo que se ajustan bien a nuestros productos. Tenemos un problema con el valor del euro, pero estamos haciendo un esfuerzo importante para seguir estando en el mercado cubano, no podemos perder el espacio que hemos ganado.
¿Qué límites tiene la expansión de la empresa vasca en este país?
La verdad es que nuestras empresas no son grandes y poderosas como para garantizar la financiación que a veces necesitamos. Estamos haciendo esfuerzos y contactos con las entidades financieras vascas, porque además creemos que nuestras cajas también tienen buenas posibilidades de negocios.
¿Porqué una Asociación de Empresarios Vascos en Cuba?
Hemos mantenido sin fallar el pabellón vasco. La idea surgió en 1991 y la llevamos adelante. Afrontamos situaciones comunes, nos asociamos para proyectos conjuntos y apoyamos iniciativas que puedan ser de interés común. Comenzamos unos 20 y ya somos 4o.
¿Cuáles son sus objetivos para 2008?
En estos momentos es muy importante conseguir respaldo financiero, intentar bajar los costes y poder ser más competitivos; eso es un reto para nosotros.
M. ETXEBARRIA
