A Camino San Martín, presidenta del Concejo de Muru, lo que más le preocupa de este proyecto es que pasarían 500 camiones al día hacia el vertedero para depositar los escombros, y con el viaje este tránsito se duplicaría.

«Esto sería una auténtica barbaridad. Los camiones no pasarían por Muru, sino que la mayoría lo harían por Astrain, pero como es una carretera muy estrecha, ni siquiera pueden cruzarse dos camiones. Aquí estamos viendo todos los días los problemas que hay con los camiones, que se suben a las aceras y hacen temblar hasta las casas. Yo vivo cerca de la carretera y lo estoy padeciendo todos los días. Las casas se agrietan cada vez más. Si ya de por sí antes se agrietaban, los camiones y tractores que pasan están agravando este deterioro. Si por aquí cerca pasan mil camiones cada día durante quince años, esto sería terrible», remarca Camino San Martín.

Las afecciones del tráfico pesado por los pueblos no se limitan a los agrietamientos. Según un estudio realizado por el doctor Javier Elorz, jefe de Neumología del Hospital de Basurto, también aumenta el porcentaje de niños asmáticos. «Al haber más tráfico, cerca de las autopistas aumenta el número de asmas severas», concluye este estudio.

Joxemiel Bidador, presidente del Concejo de Paternain, también está en contra del proyecto de vertedero, al igual que los demás miembros que integran la actual Junta del Concejo y los que integraban la Junta anterior. «No es sólo un rechazo personal, sino que es la opinión del pueblo», afirma.

Con casi 300 personas empadronadas, esta localidad es una de las mayores de toda la Cendea de Zizur, y aunque las afecciones del futuro vertedero no les llegarían directamente, no podrían evitar el considerable aumento del tráfico. «Dicen que esos mil camiones diarios irían por la carretera vieja de Astrain, pero a mí se me hace muy extraño que el Gobierno de Navarra permita que haya semejante tráfico en la Autovía del Camino, máxime cuando a determinadas horas ya se están montando unos atascos impresionantes en las entradas y salidas de Pamplona. Yo creo que la mayor parte del tráfico se llevará por la carretera de Gazolaz y Paternain, así como por Muru-Astrain y Astrain», opina Joxemiel Bidador.

También sospecha que, dadas las dimensiones del vertedero, «prácticamente toda la parte norte de Navarra va a terminar llevando los escombros a este lugar», y fundamenta su sospecha en la existencia de la carretera Irurtzun-Astrain a través de Paternain, «lo que también nos va a afectar bastante».

«Son unas carreteras estrechas y no hay ningún plan para ampliarlas. Ahora mismo hay bastante tráfico de camiones desde la cantera de Oskia hacia Alaitz, y hay momentos en que se pasa bastante justo. Los camiones que llevan la piedra a la cantera van bastante rápidos, y aunque todavía no ha pasado nada, nos tememos que pasará algún día. A esas velocidades y en carreteras tan estrechas, tiene que ocurrir algún accidente. Si además pasan los camiones al vertedero, con el polvo y el barro que van a generar, la situación va a ser bastante complicada», augura el presidente del Concejo de Paternain.

También constata que en ciertas épocas del año suele haber buen número de tractores en la carretera, como ocurre estos días con motivo de la siembra. «Esta es la zona cerealista por excelencia de Navarra, pasan unos tractores terribles, con unas maquinarias grandísimas que realizan muchos viajes desde la Cooperativa Orbalaiz hasta las piezas. Estos tractores se van a juntar con los camiones del vertedero y con los coches de los vecinos, y prácticamente no va a haber espacio para todos», prevé Bidador.

El rechazo de Paternain al vertedero también es «en solidaridad» con sus vecinos. «Hoy les ha tocado a ellos y mañana nos puede tocar a nosotros», afirma el presidente de este concejo, quien recuerda que Undio estaría a escasa distancia del vertedero.