El alcalde gasteiztarra, Patxi Lazkoz, achacó las lagunas en materia de seguridad que se han encontrado en Mendizorrotza, después de que una valla cediera en el pasado derbi ante el Eibar, a que «durante la época en la que Dmitry Piterman dirigió el Deportivo Alavés no se invirtieron los recursos económicos que se debía» para la seguridad del campo.

En su habitual comparecencia de todos los viernes, el socialista explicó que los que estaban antes, «parece que no hicieron nada con los recursos económicos que se debían invertir en la seguridad del campo. Si se hubiese hecho un adecuado mantenimiento, hoy no estaríamos hablando de este tipo de problemas».

Lazcoz dijo también que «la mala herencia recibida por la anterior Junta Directiva, no es sólo en la mala imagen del club o del proyecto deportivo, también sobre algunos aspectos de la gestión que son muy importantes».

Según el alcalde, todos los años los equipos de Primera y Segunda División reciben una serie de cantidades de la recaudación de las quinielas que se deben invertir en seguridad. Sin embargo, estas asignaciones que recibe la Liga deben emplearse siempre en elementos de control de entrada como tornos o cámaras de seguridad, nunca a modificar gradas, vallas o vigas. Existe otro porcentaje que reciben los clubes por las apuestas, pero sin especificación sobre dónde deben invertir ese dinero.

Sobre las reuniones que se están llevando a cabo entre el club y el Consistorio, con la pelea sobre quién debe asumir los gastos de la posible supresión de los fosos, Lazcoz aseguró que la prioridad es «la seguridad de los espectadores y no quién paga o deja de hacerlo».

Además, indicó que lo que no puede ser es que haya una decisión unilateral de nadie, de ninguna de las dos partes, «porque estamos obligados a entendernos», manifestó el socialista.