La jueza Laurence Le Vert aceptó ayer la petición de puesta en libertad realizada por la abogada de Joan Bidart que se encuentra en el hospital siquiátrico de Aigurande tras haber intentado suicidarse en la prisión de Tulle.

El preso político ortzaizarra será trasladado a un hospital de Baiona a principios de la semana que viene, una vez que el prefecto del Departamento de Corrèze haya firmado la orden de traslado, y cuando reciba el alta médica podrá retornar con su familia.

Su abogada, Yolanda Molina, informó ayer de que antes de decidir la puesta en libertad de Bidart Le Vert lo había hecho examinar por un médico especialista. Las conclusiones del informe de éste revelaron que «el estado psíquico de Bidart es incompatible con su mantenimiento en prisión».

Bajo «estricto control»

Askatasuna comunicó que de todos modos el preso político quedará «bajo estricto control judicial» y deberá respetar ciertas condiciones como no salir de su localidad salvo por cuestiones laborales o médicas, no frecuentar determinadas personas y locales, o presentarse en comisaría con una frecuencia concreta.

El organismo antirrepresivo insistió en que ni Joan Bidart ni los otros cuatro ciudadanos detenidos en la misma operación policial deberían haber sido encarcelados «y aun menos aislados», y calificó de «repugnantes estos comportamiento criminales» al tiempo que manifestaba su «preocupación por esta situación que no hace más que empeorar».

Askatasuna reiteró el llamamiento a la manifestación de hoy a las 17.00 en Donibane-Garazi. Por su parte, Batasuna ha denunciado «la aplicación del aislamiento criminal decidida por los jueces de París» y se ha adherido a la manifestación que partirá desde el Ayuntamiento, lo mismo que AB, que también condena «firmemente la dispersión y el aislamiento que sufren presos y familias» y exige que «se ponga fin a dicha política».