Al menos 13 personas murieron y unas cuarenta resultaron heridas tras la serie de explosiones registradas en distintas oficinas judiciales en las ciudades indias de Benarés, Faizabad y Lucknow.

Las explosiones tuvieron lugar entre las 13.00 y las 13.30 hora local, cuando en los tribunales había gran movimiento de abogados que entraban y salían coincidiendo con la hora del almuerzo. El mayor número de víctimas se produjo en la localidad sagrada de Benarés, donde tres bombas estallaron cerca de la sede del tribunal municipal, con el resultado de, al menos, nueve muertos y unos 45 heridos, según informaron las autoridades locales.

Casi al mismo tiempo, otras dos bombas colocadas cerca del tribunal de Faizabad, a unos 175 kilómetros de Benarés, provocaban la muerte de cuatro personas. Ambas ciudades están en la región norteña de Uttar Pradesh, la más poblada de la India y en cuya capital, Lucknow, hizo explosión otro artefacto cerca del tribunal civil, que no causó víctimas por ser «de baja intensidad», remarcaron los investigadores. Fuentes policiales señalaron que las bomgas estaban en bicicletas aparcadas en las cercanías de los tribunales y, aparentemente, llevaban temporizadores para que estallaran casi al mismo tiempo.

La jefa del gobierno regional de Uttar Pradesh criticó lo sucedido fue un «fallo de las agencias de inteligencia».

Por su parte, el inspector general de la Policía del Estado, Brij Lal, dijo que «se trata de un atentado contra abogados». Minutos antes de los atentados, un grupo que se hizo llamar «Indian Muyahidin» los reivindicó a través de un correo electrónico enviado al canal NDTV.

El ministro de Interior, Sriprakash Jaiswal, declaró que las explosiones simultáneas son prueba de que «hay una profunda conspiración». En declaraciones recogidas por NDTV, pidió a la ciudadanía que «permanezca unida y desafíe los motivos de estos terroristas».

Las autoridades, además, decretaron la alerta máxima en distintas ciudades del país, entre ellas, Nueva Delhi, Mumbai, Bangalore y Hyderabad.

Protesta de abogados

Estos ataques se producen justo una semana después de que abogados de Uttar Pradesh decidieran por unanimidad no defender a militantes islamistas procesados judicialmente bajo su jurisdicción.

El presidente del colegio de abogados de Lucknow, Sadeer Bhatia, denunció que los letrados han pedido en varias ocasiones «mayor seguridad» en las instalaciones judiciales y que se registre exhaustivamente a quienes entran y salen, «pero eso no ha ocurrido».

Tras los atentados, numerosos abogados se manifestaron en la capital de Uttar Pradesh. Amenazaron con paralizar todos los procesos si las autoridades no les ofrecen mayor seguridad. India ha sufrido varios atentados con bombas en lo que va de año, el más sangriento ocurrió el pasado mes de febrero en un tren que iba de Nueva Delhi a Lahore.