Sharif pone fin a su exilio y vuelve a Pakistán sin buscar «ninguna vengaza»
GARA |
El ex primer ministro paquistaní Nawaz Sharif, derrocado por el actual presidente, el general Pervez Musharraf, puso ayer fin a siete años de exilio y regresó a su país con el compromiso de participar «plenamente» en política sin buscar ninguna «venganza» personal.
Sharif, líder de la Liga Musulmana de Pakistán-N (PML-N), viajó en avión desde Arabia Saudí a Lahore, donde tuvo un recibimiento triunfal por parte de cientos de seguidores que le esperaban en el aeropuerto .
Sin ocultar su emoción, el ex primer minstro aseguró que participará plenamente en la política nacional, al tiempo que descartó cualquier «venganza» por los sucesos de los últimos años. Insistió en su compromiso «con el pueblo de Pakistán».
Con motivo de su regreso, el mismo día en que la también ex primer ministra Benazir Bhutto formalizó su candidatura electoral, las autoridades desplegaron 5.000 policías para garantizar el orden. El partido de Sharif informó de la detención en las últimas horas de al menos 1.800 de sus seguidores.
Observadores políticos no descartan que Sharif haya alcanzado un acuerdo con Musharraf, que habría permitido su regreso con el fin de negociar una alianza para hacer frente a Bhutto.