El candidato de UPN es Rajoy, admite Sanz
«Haremos campaña de apoyo al PP y a nuestro candidato, que es Mariano Rajoy». Así lo ha reconocido el presidente de UPN y del Gobierno de Nafarroa, Miguel Sanz, en una entrevista concedida a un rotativo local, en la que anuncia cambios en el acuerdo electoral con el PP.
GARA |
El presidente de UPN y del Gobierno de Nafarroa, Miguel Sanz, ha anunciado que habrá cambios en el acuerdo electoral que próximamente firmará su partido con el PP.
En una entrevista concedida a «Diario de Navarra», Sanz anuncia que su propósito con las modificaciones que desea introducir en el acuerdo electoral (que no concreta) es que UPN «pueda mantener una cierta autonomía» con respecto al PP, en cuyas listas concurren a las elecciones españolas. No obstante, aclara que UPN hará «campaña de apoyo al PP y a nuestro candidato, que es Mariano Rajoy».
«Defenderemos ese programa y criticaremos lo que creamos criticable del PSOE», manifiesta el líder de la derecha navarra, pero matiza que estas críticas serán «sin la crispación generada (en el pasado) por un proceso de negociación con ETA y unas relaciones absolutamente bloqueadas entre el Gobierno de España y el de Navarra».
En este sentido, Sanz apunta que la entrevista que mantuvo con el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, tras su investidura, posibilitada por la abstención del PSN, ha permitido reconducir las relaciones entre ambos ejecutivos.
Miguel Sanz reconoce al respecto que «algunos piensan que estoy actuando de forma diferente a como lo he hecho con anterioridad», y les responde diciendo que «yo creo que no, sigo defendiendo lo mismo».
En la misma línea, precisa que lo que ha cambiado es que «ya no hay un proceso de negociación con Batasuna y ETA en el que el PSOE participaba, impulsaba y apoyaba. Muerto el perro, se acabó la rabia».
En otra de sus respuestas, el dirigente regionalista revela que «algunos, con el fin de machacar al PSOE, hubiesen preferido que UPN no gobernase y así tener munición».
El «tapón» de las relaciones
Preguntado sobre si las negociaciones entre Madrid y ETA eran el «tapón» que impedía las relaciones entre el Gobierno español y el de Nafarroa, Sanz responde que «sin ninguna duda».
«Había una actitud en el Gobierno de España que, como quiera que nosotros éramos críticos con ese proceso, impedía cualquier contacto. Se originó una situación que es mejor olvidar», contesta Miguel Sanz.