El Gobierno de Sri Lanka, en guerra desde hace 35 años contra la minoría tamil, prometió que matará al líder del Ejército de Liberación de la Tierra Tamil, Velupillai Prabhakaran, después de que hiciera lo propio a comienzos de este mes con el número dos y líder político del LTTE, S.P. Thamiselvan.

«La eliminación de Thamiselvan es un mensaje muy claro: ellos saben que disponemos de buena información sobre sus desplazamientos», aseguró desafiante el ministro de Defensa cingalés, Gotabhata Rajapakse, hermano del presidente del país, Mahinda Rajapakse.

«Nuestro objetivo es debilitarlos, vencerles militarmente (...) Luego será posible una solución política», añadió.

Contra un mensaje de radio

En su discurso anual, el líder de la guerrilla tamil certificó ayer que la paz es imposible con el «genocida» Gobierno de Sri Lanka. «La nación cingalesa (...) tiene como objetivo destruir a la nación tamil», sentenció.

Poco antes de que estas declaraciones fueran enviadas por internet a las agencias, cazas cingaleses destruyeron la radio de la guerrilla, que debía difundir el mensaje. El ataque se saldó con varios civiles muertos.

Las tropas gubernamentales llevan a cabo desde principios de año una gran ofensiva con la que han reocupado el este de la isla y limitado las fuerzas marinas de la guerrilla.

Ésta ha respondido con ataques aéreos contra infraestructuras aeroportuarias cingalesas, como el pasado mes de octubre, cuando destruyeron varios aviones del Ejército del Aire.

Además de disponer de fuerza naval y de pequeños aviones, la LTTE tiene batallones de kamikazes prestos a la acción.